Asaja Córdoba ha rebajado este sábado del 100 al "40 ó 50 por ciento" el nivel de seguimiento de la huelga que los trabajadores del sector de los cítricos están realizando desde este jueves en el ámbito territorial del Bajo Guadalquivir —tanto en los municipios cordobeses de Almodóvar del Río, Posadas, Palma del Río y Hornachuelos, como en los sevillanos de Peñaflor y Lora del Río—, y ha criticado la actuación de los piquetes informativos, que están "asustando" a los trabajadores para que "secunden" el paro.

"Si no fuera por ellos habría menos gente haciendo huelga", ha lamentado, en declaraciones a Europa Press, el presidente de Asaja Córdoba, Ignacio Fernández Mesa, que, por ello, ha tildado de "conminativos" a dichos piquetes, que, en su opinión, "no tienen nada de informativos".

Y es que, según ha explicado Fernández, los piquetes acuden a los almacenes donde hay trabajadores provistos de "cámaras de vídeo", con el objetivo de "amedrentarlos y forzarles a dejar de trabajar", lo que, según ha apuntado, ha provocado ya algunos incidentes.

Esta versión contrasta con la que han aportado fuentes sindicales, que han cifrado en un cien por cien el nivel de apoyo logrado por la huelga y han defendido el comportamiento de los piquetes frente a la "actitud provocativa" que, según han afirmado, están manteniendo unidades de la Guardia Civil contra algunos de ellos, que "sólo pretenden informar" y a los que "impiden acercarse a los almacenes para repartir octavillas".

Por otro lado, el presidente de Asaja Córdoba ha negado representatividad a los sindicatos que han convocado esta huelga, porque, en su opinión, son "desconocidos" en el campo cordobés y sevillano, donde "los únicos sindicatos reconocidos como interlocutores válidos son CCOO y UGT", ha zanjado.