El sindicato Ustea-Cádiz ha criticado este jueves a la Junta de Andalucía por retirar "demasiado tarde" el contrato al Grupo Brassica —una de las concesionarias de la gestión del servicio de comedor en los centros educativos de Andalucía— y entiende que el inicio de resolución del contrato con la empresa ante los reiterados "incumplimientos" en la prestación del servicio es una de las consecuencias negativas de la externalización de servicios como este "desde lo público hacia lo privado".

Cabe recordar que la situación ha derivado en la convocatoria de huelga indefinida, debido a los impagos de nóminas, por parte de los trabajadores de este grupo de alimentación, que ha dejado desde este pasado martes sin servicio de comedor a alumnos de 122 colegios de toda Andalucía repartidos en Cádiz, Granada, Sevilla y Huelva.

A través de un comunicado, el sindicato Ustea expone que los profesionales del grupo llevan "más de seis meses sin cobrar por un trabajo que realizan a diario", una situación que "no sólo repugna", según sostiene el sindicato, sino que está causando "un perjuicio a miles de familias que, acogidas o no a bonificaciones, se han visto perjudicadas por este hecho". "De repente, se ven obligadas a hacer acrobacias o recurrir a familiares y amigos para que se hagan cargo de sus hijos", según sostiene Ustea, que califica la situación de "insostenible".

Critican que "más de un año después" de que llegasen denuncias por parte de las familias sobre la cantidad y la calidad de la alimentación que recibían sus hijos, la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía "toma ahora cartas en el asunto" y retira la concesión a la empresa Brassica Group, tanto por el impago de las nóminas como por incumplimiento de contrato, al tiempo que inicia una auditoría para "supervisar" la mencionada calidad y cantidad del servicio.

Por ello, exigen el pago "inmediato" de las nóminas a los trabajadores de Brassica Group y la subrogación de los mismos; la retirada del contrato "a esta empresa fraudulenta"; la reposición "a la máxima brevedad" del servicio de comedor para atender al alumnado perjudicado; así como una disculpa de la Conserjería de Educación "por la falta de celo a la hora de conceder contratos a empresas que no cumplen con lo acordado y ponen en peligro un derecho de la infancia tan elemental como es el derecho a una alimentación saludable y de calidad".