La Policía Nacional detiene a cinco personas en Gijón por delitos contra el patrimonio

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Gijón a cuatro varones y una mujer acusados de los delitos de Robo en interior de vehículos, Daños, Usurpación de Identidad, Receptación y hurto de telefonía móvil.

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Gijón a cuatro varones y una mujer acusados de los delitos de Robo en interior de vehículos, Daños, Usurpación de Identidad, Receptación y hurto de telefonía móvil.

La investigación dio comienzo a raíz de la denuncia de una mujer, que finalmente sería la que resultó detenida, por las amenazas a las que estaba siendo sometida por dos individuos.

El pasado día 2, tres de los arrestados, la mujer y dos varones, se alojaron en una pensión de la zona centro de la ciudad, y en ella la amenazaron de muerte con un arma blanca, consiguiendo escapar de la habitación y solicitar ayuda policial.

El trabajo realizado por los investigadores de la Policía Nacional ha desvelado a un Grupo de criminales, la mujer y los dos varones que con ella se alojaban, dedicados a cometer diversos hechos delictivos, siendo su 'modus operandi' actuar de noche, robando en el interior de vehículos, tanto en garajes como en la vía pública, principalmente en El barrio de La Calzada.

Los agentes de la Policía Nacional identificaron a un cuarto individuo que participó en alguno de los robos descritos anteriormente, el cual también fue localizado y detenido.

Asimismo, con la documentación sustraída del interior de los vehículos y aprovechando el parecido físico con el titular de alguno de los Documentos de Identidad, abrían cuentas bancarias, compraban tarjetas y daban de alta líneas de telefonía móvil.

Otros de los hechos delictivos que se les atribuye a los detenidos son la sustracción de teléfonos móviles en tiendas especializadas, los cuales eran vendidos, a bajo precio, a un quinto individuo que también ha sido detenido, y que ha sido acusado de un delito de receptación, y la quema de contenedores y coches por diversión o por venganza hacia sus propietarios.

Todos los útiles que utilizaban para cometer los hechos eran guardados por la mujer, al ser esta la que carecía de antecedentes policiales, con lo cual minimizarían las acusaciones en caso de ser detenidos por la policía. Esta mujer también era, en ocasiones, forzada para ejercer la prostitución en un piso de esta ciudad.

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