La empresa Subtropical Valencia, con sede en Sagunto, iniciará este miércoles la destrucción de cerca de 3.000 plantas de palmera de la variedad 'Phoenix canariensis', al "no poder hacer frente a las desmesuradas exigencias que impone la actual legislación" para intentar controlar el avance de la plaga del picudo rojo.

Según informa la Asociación Profesional de Flores, Plantas y Tecnología Hortícola de la Comunitat Valenciana (Asfplant), esta mercantil es la principal comercializadora de Europa de esa variedad de planta en contenedor y se encuentra "en una situación límite que puede desembocar incluso en su cierre tras 20 años de actividad".

Al respecto, explica que la normativa obliga a inmovilizar las plantas durante dos años y a aplicar "tratamientos costosísimos", unas exigencias "prácticamente imposibles de cumplir".

Según las mismas fuentes, la legislación impide a los viveros comercializar las plantas durante dos años y establece que, además, durante ese período "deben superar hasta ocho inspecciones y aplicar mientras tanto costosísimos tratamientos".

El gerente de la empresa, Vicente Villanueva, lamenta la "falta de soluciones" ante un problema que "está asfixiando a este sector y al que nadie parece dispuesto a dar una solución". Por este motivo, ha decidido destruir esas 3.000 palmeras este miércoles, a partir de las 11.00 horas, en las instalaciones de la compañía en Sagunto.