Según la Policía Nacional, las investigaciones sobre los robos, que se produjeron durante diciembre del año pasado y abril de este año, llevaron a la Policía a deducir que el autor de los hechos era alguien que conocía cómo trabajaban los cajeros automáticos y los protocolos de seguridad.

El ahora detenido, en tan sólo 30 minutos accedía al interior del habitáculo del cajero automático por medio de una tarjeta de crédito o bien aprovechando que la puerta estuviera abierta, después procedía a la apertura de la puerta de acceso de la sucursal con una llave maestra y desactivaba la alarma.

Posteriormente, se dirigía a la zona posterior del cajero, tecleaba una combinación que le permitía acceder al interior de la caja fuerte y extraía el dinero en metálico y sobres de ingresos.

Después de tres meses, en los que cesaron los hechos, el acusado volvió a actuar, pero en esta ocasión aprovechando el momento en el que los cajeros eran reparados, por lo que la Policía dedujo que el responsable era un empleado de la empresa que realizaba las reparaciones.

La Policía procedió a su arresto el 19 de octubre, tras haber comprobado que M.A.S. había actuado en todas las reparaciones de los cajeros en los que se había notado un descuadre de dinero en efectivo.

El detenido ya ha sido puesto a disposición judicial.