El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, como ya había anunciado aunque sin concretar la cantidad, ha propuesto la reducción de un 20 por ciento del número de diputados en las Corts Valencianes, que pasarían de 99 a un máximo de 79 en la próxima legislatura. Así, ha reclamado un "esfuerzo a todos" como se está pidiendo a los ciudadanos para poder "hacer más con menos".

En este sentido, ha ofrecido a la oposición un "marco de diálogo sincero" para llevar a cabo esta propuesta y ha instado a las Corts a "demostrar el mismo espíritu de consenso" que al inicio del autogobierno, hace 30 años.

En el marco de esta reducción de la administración, Fabra ha ofrecido reducir a la mitad los miembros de las instituciones consultivas y normativas de la Generalitat, salvo el Síndic de Comptes y el de Greuges, y reducir un 20 por ciento los gastos de funcionamiento de todas ellas, así como reubicarlas en edificios públicos. Al respecto, ha defendido que "ajustar no significa renunciar a las señas de identidad".

Estas medidas se enmarcan en la necesidad, según ha destacado, de reducir el déficit de la administración y lograr la estabilidad presupuestaria como camino para salir de la crisis. Para ello, ha ofrecido diálogo para afrontar las "reformas necesarias".

El presidente de la Generalitat se ha expresado de esta manera en su primer Debate de Política General de la Comunitat tras su investidura hace 14 meses ante un hemiciclo en el que se encontraba su antecesor en el cargo, Francisco Camps, que ha llegado una vez el jefe del Consell había comenzado su discurso.

Alberto Fabra se ha dirigido al plenario durante una hora y veinte minutos con un discurso en el que se ha referido a la situación económica de la Comunitat Valenciana, agravada por la insuficiente financiación, ha dicho, y justificando el cambio de prioridades de gobierno por la crisis. Además, ha defendido que la Comunitat "va por el buen camino" para salir de esta situación.

Ha realizado un balance de su gestión al frente del Consell —que ha sido la parte más extensa de su discurso—, tras lo cual ha presentado el grueso de los anuncios para este nuevo ejercicio. Se ha dejado para el final, y pasando del castellano al valenciano, la parte reivindicativa para reclamar agua y financiación, así como el Corredor Mediterráneo y seguridad jurídica para los chiringuitos, entre otros asuntos.

Los aplausos desde la bancada 'popular' han ido de menos a más, motivados generalmente por su portavoz en funciones, Rafael Maluenda, que ha llevado la voz cantante en este apartado.

Agua y financiación

Ya en valenciano, el jefe del Consell ha manifestado que es un "firme defensor" del estado de las autonomías y considera que ha llegado el momento de "adaptar este modelo a la realidad actual". "Ya está bien de intentar demostrar quién es más que el otro porque hay que ser eficientes", ha señalado.

Por ello, en la próxima conferencia de presidentes del 2 de octubre que se inicie una "profunda reflexión del papel de responsabilidades las comunidades en España", ha indicado.

Asimismo, ha pedido al Gobierno de España la "misma comprensión" que se pide para la Comunitat, donde "se están haciendo los deberes y cumpliendo con los compromisos". Así, ha apuntado que la solidaridad "debe ser recíproca" y el Estado "debe cumplir con los compromisos con la Comunitat". "Soy leal con España", pero "sobre todo con la sociedad valenciana", ha apostillado.

Así, ha asegurado que defenderá lo que considere "justo" para la Comunitat ante el Gobierno central o la UE y, en este sentido, ha afirmado que continuará reclamando la financiación y las inversiones del Estado que nos corresponden; también que la Comunitat reciba el agua que necesita en el nuevo Pacto Nacional por el Agua porque "no es propiedad de ningún territorio". Entre sus pretensiones, también está continuar exigiendo la ejecución del Corredor Mediterráneo.

Un total de 22 puntos han marcado la agenda de propuestas y anuncios del jefe del Consell en su discurso, en el que manifestado su voluntad de trabajar por una nueva administración menos "paternalista" y que sea más eficiente en el manejo de su presupuesto.

El presidente de la Generalitat ha citado el empleo, el bienestar de los ciudadanos y una nueva administración como sus ejes prioritarios de acción. Así, además de los mencionados, ha ofrecido un gran pacto para defender "no dañar" la marca Comunitat Valenciana y defender sus señas de identidad, una financiación adecuada y a los sectores productivos tradicionales y emergentes.

Del mismo modo, ha realizado algunos anuncios destacados en materia de sanidad, como aprobar el próximo viernes un nuevo modelo de gestión compartida del sistema de salud que aplicará "criterios empresariales" a este sector para ahorrar 1.700 millones en 10 años, con el objetivo de "hacer sostenible el sistema".

En el ámbito de empleo, las diputaciones provinciales y los ayuntamientos invertirán 99 millones de euros en los próximos tres años para incentivar la contratación de más 15.000 parados. Además, convertirá el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) en un Banco de Emprendedores y consensuará con agentes económicos y sociales una revisión de la política industrial para que llegue a representar el 20 por ciento del PIB regional.

Balance de gobierno

El jefe del Consell ha aprovechado su intervención para realizar un balance de estos 14 meses al frente de la administración valenciana, centrado en alcanzar la estabilidad presupuestaria y cumplir los objetivos de déficit marcados por el Gobierno central a través de la reducción del gasto. En este sentido, ha enumerado algunas de las medidas de recorte adoptadas en los planes de reequilibrio y ha destacado que se han ahorrado hasta el momento 560 millones en el capítulo de personal.

En este apartado, Fabra ha aprovechado que citaba la inauguración del parque científico de la UJI para señalar que "estuvieron algunas de sus señorías, aunque alguna puede que no se enterara", en alusión y crítica a la actuación de la diputada de EUPV Marina Albiol, durante la protesta ese día en el que varios estudiantes lanzaron huevos al presidente de la Generalitat.