La tranquilidad y la ausencia de heridos han marcado este miércoles el cuarto encierro de Cuéllar (Segovia), que se ha desarrollado con normalidad por el campo y sin incidencias destacables en el recorrido urbano, donde los astados han llegado unos minutos antes de lo previsto.

La penúltima jornada ha sido protagonizada por seis toros de la ganadería salmantina de Carlos Charro, de Narros de Matalayegua, unas reses que serán lidiadas esta tarde por los diestros Juan José Padilla, David Fandilla 'El Fandi' y Javier Herrero.

Tras una accidentada salida de corrales en la mañana de ayer, donde un novillo rezagado corneó a un septuagenario y a una mujer de 50 años, el comienzo del encierro junto al río Cega se ha producido hoy sin complicaciones, con toda la manada agrupada. La tranquilidad, con algún problema puntual de los caballistas, ha sido la tónica en el recorrido por el campo.

Una vez alcanzada la parte alta del denominado 'Embudo', a las puertas de la ciudad, dos de los astados se han precipitado por la ladera izquierda, lo que ha motivado a los caballistas a adelantar la bajada hasta el tramo urbano, alrededor de cinco minutos antes de las 9.30 horas.

El trayecto por las calles se ha producido posteriormente con los bravos y los mansos agrupados en los primeros tramos, para quedar después descolgados dos de los toros, que han concluido el trayecto hasta el coso de forma independiente.

El herido ayer,

En planta

El cuarto encierro ha finalizado sin heridos, según ha confirmado a Europa Press el cirujano de la Enfermería de la plaza de toros, Pablo Vázquez.

El doctor ha informado por otra parte de que el hombre herido ayer tras sufrir cinco cornadas junto a los corrales, un vecino de Pinarejos de 71 años, está fuera de peligro en el Hospital de Segovia. Tras permanecer en reanimación, ha sido trasladado a planta esta mañana.

Los encierros de Cuéllar se celebran con motivo de las fiestas en honor a la Virgen del Rosario, patrona del municipio. Mañana se celebrará la quinta y última jornada del ciclo.