Al menos 40 personas han muerto este jueves en un ataque de las fuerzas del régimen sirio contra una panadería en el barrio de Qadi Askar, en la ciudad septentrional de Alepo, ha informado a EFE la activista independiente Wed al Hayat.

Al parecer cuatro proyectiles cayeron sobre una cola de personas que esperaban para comprar el pan, y señaló que la cifra de víctimas es un balance provisional, según ha explicado Al Hayat. Otras 40 personas han resultado heridas en las explosiones. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos ha confirmado este ataque, si bien ha cifrado de momento en diez el número de víctimas mortales.

El ataque se produce horas después de que Siria haya sido expulsada de la Organización de Cooperación Islámica, tal y como han confirmado los jefes de Estado y representantes de 57 estados esta madrugada tras celebrar una cumbre extraordinaria en La Meca.

Otras 40 personas murieron este miércoles en la localidad de Azaz, en la provincia de Alepo, en ataques de cazas del Ejército sirio contra edificios residenciales, según activistas opositores y la organización internacional Human Rights Watch (HRW).

Precisamente este miércoles la ONU cocluyó que el Gobierno sirio fue y la milicia progubernamental Shabiha son los responsables de la matanza del mes de mayo en la localidad de Al Houla, donde fueron asesinados más de un centenar de civiles, la mitad de ellos mujeres y niños.

En su informe, la comisión independiente de la ONU para investigar las violaciones de los derechos fundamentales en Siria desde el inicio del conflicto hace 17 meses acusa al Gobierno sirio de crímenes de guerra y contra la humanidad, así como a los grupos armados de la oposición.