El fiscal de Menores del Principado, Jorge Fernández Caldevilla, ha criticado este viernes las deficiencias que en materia de seguridad presenta el centro de Miraflores, en Noreña, y ha solicitado que se traslade a los adolescentes a otro edificio, "más moderno y funcional".

Durante la presentación de la memoria de actividad de su departamento, ha recordado que se trata de un centro de protección para menores de entre 12 y 18 años en dificultad social o con problemas de conducta, donde continúan produciéndose episodios violentos que ponen en riesgo a los propios adolescentes, a sus compañeros y educadores.

El fiscal ha abundado que pese a tratarse de una petición reiterada de la Fiscalía, Miraflores se creó como un centro de residencia, no de contención, y no cuenta con los medios adecuados para atajar las "numerosas fugas" de sus residentes.

De este modo, y aunque bien dotado de medios materiales, ha concluido que el centro no es, por las características del lugar, suficientemente seguro y "no sirve a los fines para los que se ha creado".