Unas 150 niñas afganas habrían enfermado tras beber agua envenenada en su escuela secundaria en el norte del país, según las autoridades locales. Al parecer, las niñas habrían sido víctimas de un envenenamiento por parte de los conservadores que se oponen a la educación de la población femenina, según ha informado Al Jazeera.

Desde que el 2001 los talibanes fueran derrocados, las mujeres afganas han vuelto a las escuelas, sobre todo en la capital, Kabul.

"El envenenamiento puede ser obra de que están en contra de la educación de las niña", sugirió a la agencia de noticias árabe Jan Mohammad Nabizada, portavoz de Educación de la provincia de Takhar.

Los ataques a las niñas que estudian, a los maestros y a sus edificios escolares son rutinarios en el sur y el este del país, zonas donde la insurgencia talibán cuenta con más apoyo.

Las niñas sufren dolores de cabeza y vómitos "Estamos 100% seguros de que el agua que bebieron dentro de sus clases fue envenenada", dijo Nabizada.

Algunas de las 150 niñas —que sufren dolores de cabeza y vómitos— se encontraban en estado crítico, mientras que otras fueron capaces de volver a casa después de ser atendidas en el hospital.

Ninguno de los funcionarios han evitado responsabilizar a un grupo en particular en el ataque, por temor a represalias. La educación de las mujeres estuvo prohibida en Afganistan entre 1996-2001.