Así lo aseguró hoy la consejera de Familia y Asuntos Sociales, Beatriz Elorriaga, tras visitar el Centro de Intervención en Abusos Sexuales Infantiles (CIASI), el primero de estas características que existe en la región.

Este centro, que atiende a una media de dos niños al día, está especializado en prestar apoyo psicológico, jurídico y social a niños implicados en supuestas situaciones de abuso sexual -tanto los que han sido víctimas como sus agresores-, así como a sus familias.

Ámbito familiar

De acuerdo con los datos de la consejera, en un 55 por ciento de los casos, la supuesta agresión sexual tuvo lugar en el ámbito familiar, mientras que el 45 por ciento restante se dio en contextos extrafamiliares (colegios, grupos de iguales, entre otros).

La titular de Familia y Asuntos Sociales subrayó que este centro atiende a víctimas -hasta el momento, el 86 por ciento de los niños y adolescentes atendidos-, pero también a menores presuntamente responsables de este tipo de agresiones. "Ante el sufrimiento de las víctimas no podemos ponernos una venda, no cabe la paralización propia del estupor o lamentarse, sino que es preciso actuar de forma contundente, reparadora y preventiva", dijo Elorriaga.

Elorriaga especificó que se han atendido a 103 menores, de los cuales el 66 por ciento eran niñas y el 34 restante a niños.

Por edades, el 23 por ciento de los usuarios del centro tiene entre 4 y 6 años; el 20 por ciento entre 13 y 15 años; el 17 por ciento entre los 10 y los 12 años; el 17 por ciento de 16 a 18 años y el 6 por ciento de 0 a 3 años.