Hosteleros ven "poco justificable" que Sánchez Gordillo participara en el piquete que actuó en un restaurante

La Asociación Empresarial de Hostelería de Sevilla y Provincia ha mostrado su apoyo y solidaridad para con el propietario del restaurante El Hacho II, en el municipio sevillano de Lora de Estepa, tras los hechos acaecidos el pasado 29 de marzo con motivo de la convocatoria de huelga general, cuando en el local se registró la actuación de un piquete que habría contado con la presencia del diputado autonómico por IU Juan Manuel Sánchez Gordillo.

La Asociación Empresarial de Hostelería de Sevilla y Provincia ha mostrado su apoyo y solidaridad para con el propietario del restaurante El Hacho II, en el municipio sevillano de Lora de Estepa, tras los hechos acaecidos el pasado 29 de marzo con motivo de la convocatoria de huelga general, cuando en el local se registró la actuación de un piquete que habría contado con la presencia del diputado autonómico por IU Juan Manuel Sánchez Gordillo.

En un comunicado, los hosteleros han tachado de "poco justificable" la participación de Sánchez Gordillo en el piquete, "y mucho menos lo sería si, ante la gravedad de la situación y el empleo de la coacción hacia aquellos que voluntariamente habían ejercido su derecho a trabajar, hubiese mantenido una actitud pasiva ante los hechos, que entendemos debería haber reprobado inmediatamente y por los que debía haber pedido las oportunas disculpas".

En este sentido, el presidente de la asociación, Pedro Sánchez-Cuerda, ha trasladado personalmente al propietario, Augusto Borrego, así como a su familia y a su personal el apoyo del colectivo ante la gravedad de los hechos provocados en su establecimiento.

De esta manera, los hosteleros lamentan que "nuevamente un hostelero haya sido objeto de la actuación injustificada de un piquete huelguista que ha impedido a un pequeño empresario de nuestra provincia y a sus empleados ejercer el derecho constitucional a trabajar el pasado 29 de marzo, viéndose obligado como consecuencia de dicha actuación coactiva a cerrar su negocio con las pérdidas económicas que ello le generó y, lo que es más importante, la tensión que se vieron obligados a soportar".

"Desde la asociación se quiere arropar a Augusto Borrego y, en su persona, a todo el sector hostelero sevillano, ante lo que parece se está convirtiendo en una costumbre, la de hacer de nuestros bares el objeto de la ira de los piquetes huelguistas", manifiesta el sector, que entiende que estos actos "no deben quedar impunes, y menos a aquellos cargos políticos que por acción u omisión los alientan o justifican, pues hacen un flaco favor a la imagen de Sevilla y de su provincia, así como de la clase política".

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