Dejó a todos los concejales del Ayuntamiento con la boca abierta y su protesta retumbó en el silencio de la sala de plenos ante la expresión atónita de los presentes en la sesión cuando vieron que la chica se quedó desnuda. «¡El nuevo PGOU nos deja en bolas!», gritó para hacer oír las consecuencias que traerá el Plan General.Ocurrió ayer por la mañana durante la celebración del pleno. La joven acudió, junto con algo menos de 10 personas, al interior de la sala para denunciar el fin de unos corrales de artesanos en el casco histórico de la ciudad y la desaparición de un centenar de huertos por el traslado del arroyo del Tamarguillo. Cuando la Policía comenzó a desalojar a varias de ellas por protestar, la joven –hasta ese momento callada– se levantó y se despojó de su ropa. Un agente le pidió que abandonara la sala y ella lo hizo sin mucha resistencia.