El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha señalado este lunes que las "restricciones presupuestarias" obligarán a recortar los dos millones de euros previstos para la tercera fase de Casa Mediterráneo.

García-Margallo ha realizado estas declaraciones después de mantener un encuentro con empresarios en Valencia, preguntado por la situación de Casa Mediterráneo, tras las informaciones que apuntan a que el Gobierno central podía dejar inacabadas las obras de la sede de esta institución, ubicada en la antigua estación de Benalúa de Alicante.

El ministro ha explicado que hay tres fases previstas en el desarrollo de Casa Mediterráneo. La primera fue de alrededor de un millón de euros de los cuales el Ministerio de Fomento, con cargo al 1 por ciento Cultural, pagó 750.000 euros, el 75 por ciento, que es el máximo previsto.

La segunda fase, también presupuestada en un millón de euros, "también se ha librado con ese máximo de 750.000 euros". Respecto a la tercera fase, García-Margallo ha indicado que estaba previsto un presupuesto de dos millones de euros, pero "es obvio que con las restricciones presupuestarias que tenemos habrá que recortar eso".

El ministro ha asegurado que ha hablado de este tema con la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Paula Sánchez de León, y "nuestra voluntad es terminar eso", aunque "no depende exclusivamente de nosotros".

"Depende del Ministerio de Fomento y de las otras entidades que se han comprometido a financiarlo", como son la Generalitat valenciana y los ayuntamientos de Alicante, Benidorm y Javea, ha explicado.

Además, ha señalado que "si somos capaces de encontrar un contenido que aporte valor añadido a las empresas valencianas o españoles que quieran liderar el Mediterráneo, tendremos también financiación privada".

"porvenir más que brillante"

El titular de Asuntos Exteriores y Cooperación también ha hecho hincapié en que Casa Mediterráneo tendrá "un porvenir más que brillante" si "es capaz de centralizar la llamada política de vecindad de la Unión Europea (UE), los esfuerzos de la Unión para el Mediterráneo y todos los esfuerzos en materia de perspectivas europeas, estatuto avanzado, sociales y culturales".

José Manuel García-Margallo ha señalado que España ha pedido tres cosas a la UE, una de ellas es una partida mayor para ayudar a los países del norte de África que están en la llamada transición democrática para mejorar sus condiciones económicas. Al respecto, ha advertido de que "si la libertad no va a acompañada de bienestar, es dudoso que eso permanezca".

También ha solicitado "buscar un estatuto avanzado, que implica relaciones comerciales y fomento y protección de las inversiones que pueden ser aprovechadas por muchas empresas, singularmente por las nuestras", así como poner en marcha todas las fundaciones que tiene a su disposición la UE para transmitir a estos países "cómo se hace una transición europea".

Al respecto, García-Margallo ha asegurado que España se ha ofrecido para liderar ese proyecto en la UE y "los esfuerzos" de Estados Unidos "en un terrreno que nos es infinitamente mas cercano".