La Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes (Aerte) ha valorado este martes el pago de 20,9 millones en concepto de prestaciones por dependencia anunciado este martes por el conseller de Bienestar Social, Jorge Cabré, de los que once serán para usuarios de centros asistenciales y el resto para cuidadores informales. No obstante, remarca que se trata de "ayudas que se deben a los usuarios, no a los centros", y precisa que la deuda de la Generalitat con los centros de Aerte "ronda los 50 millones" y al sumar a las otras asociaciones del sector, se acerca a 70 millones.

En declaraciones a Europa Press, la gerente de Aerte, María José Mira, ha señalado que están "a la espera de ver qué se ha pagado y a quién" puesto que esas prestaciones por dependencia "son ayudas para usuarios y en la mayoría de los casos, los usuarios han pagado esas cantidades a los centros pese a no haber cobrado o como mucho, las han aplazado pendientes de cobrar de la Generalitat". "A Aerte no son esos pagos y a sus asociados tampoco", ha recalcado.

En cualquier caso, confía en que efectivamente este miércoles se produzca ese abono y en que el Consell cumpla el compromiso de pagar a Aerte en enero los nueve millones que le debe por la atención a personas discapacitadas tuteladas por la administración, con lo que saldaría su deuda por este concepto correspondiente a 2011.

Además de esos nueve millones de euros por Prestaciones Económicas Individualizadas (PEI) y personas tuteladas que Aerte confía en cobrar a finales de mes, Bienestar Social debe otros cerca de 41 millones a sus asociados en concepto de facturas pendientes por gestión integral de centros concertados, por accesibilidad, por bono residencia, por bono centro de día y por bono respiro, entre otros.