Los impuestos y tasas municipales que entrarán en vigor en 2012 en la ciudad de Valladolid se verán incrementados tan sólo en un 3 por ciento, equivalente a su actualización de acuerdo al incremento del IPC interanual del pasado mes de agosto, a excepción de la tasa de la ORA, que sigue congelada por segundo año consecutivo, y además tendrán un marcado carácter social puesto que mantendrán y ampliarán las bonificaciones fiscales con el fin de apoyar a los jóvenes emprendedores, los parados de larga duración y las empresas que formalicen contratos indefinidos.

Así lo ha anunciado hoy el concejal de Hacienda y Educación Pública, Alfredo Blanco, quien, una vez aprobado el proyecto de modificación de ordenanzas fiscales en Junta de Gobierno, ha comparecido ante los medios para recordar que la subida propuesta, muy por debajo de la de otros ayuntamientos como Zaragoza o Vigo, con subidas del 5 y de 3,9 por ciento, respectivamente, supone cumplir el compromiso con el que el PP se presentó en los últimos comicios municipales y se aparta de la fácil tentación de paliar la caída de los ingresos municipales por la vía de repercutir esa importante merma a través de los bolsillos de los ciudadanos.

"No todos hacen lo mismo, no todos somos iguales y no todas las administraciones realizamos el mismo esfuerzo en beneficio de los ciudadanos", ha aseverado el edil, en referencia a los socialistas en el Gobierno central, "que suben impuestos por encima del IPC, como el IVA y el Impuesto sobre la Renta de las Personas Física, y muy por encima en el caso de la luz, el gas y la gasolina".

De la subida del 3 por ciento propuesta por el equipo municipal del PP para las tasas e impuestos en 2012 queda excluida, únicamente, la relativa a la tasa de la ORA, incluidos los aparcamientos disuasorios, que por cuestiones técnicas—los parquímetros no devuelven céntimos—continuará congelada un año más, ha incidido Blanco, quien, en declaraciones recogidas por Europa Press, ha aprovechado para subrayar el esfuerzo realizado por el Consistorio vallisoletano por mantener e incluso ampliar todas las bonificaciones dirigidas a los colectivos más desfavorecidos.

Cláusula de estabilización en el ibi

A tal efecto, sigue vigente la cláusula de estabilización en la regulación del IBI, de forma que el Ayuntamiento actualizará el tipo de gravamen aplicable en este impuesto en función del incremento de los valores catastrales que, en su caso, realice en diciembre el Gobierno de la nación a través de la Ley de Presupuestos Generales del Estado. Con esta medida, el Consistorio pretende evitar la doble repercusión que tendría en los recibos de los vallisoletanos la previsible subida de los valores catastrales que pudiera establecer el Gobierno central.

Pero además, se refuerza el apoyo a las familias y ciudadanos al establecer una modificación de la ordenanza reguladora del Impuesto sobre Bienes Inmuebles, ampliando un año más, hasta el octavo, el número de ejercicios en los que se bonifica a los titulares de viviendas de protección pública, reduciendo su tributación un 5 por ciento.

Las modificaciones introducidas incluyen una ampliación de los beneficios fiscales para el fomento del empleo indefinido, de forma que, en lo concerniente a la ordenanza que regula el Impuesto sobre Actividades Económicas, se incrementan las bonificaciones a aquellas empresas que aumenten sus plantillas con contratos indefinidos, llegando algunos tramos de la escala de bonificación a aumentar un 30 por ciento.

En la misma línea, se modifica la ordenanza fiscal reguladora de las tasas por licencias ambientales, de suerte que los jóvenes emprendedores y los desempleados que inicien por primera vez una actividad económica verán incrementado su beneficio fiscal del 50 por ciento actual al 60 por ciento, al tiempo que, en el ámbito de la ordenanza que regula las tasas por uso privativo y aprovechamiento del dominio público municipal, se exime del pago a aquellos que acrediten una finalidad no lucrativa o benéfica en su actividad.

Todas esas bonificaciones fiscales, como así ha recordado el titular de Hacienda, se tradujeron en el periodo 2007-2010 en las distintas ordenanzas municipales beneficiaron a 31.000 peticionarios por importe de 11 millones de euros, mientras que otros 3,8 millones destinados al apoyo de la actividad económica y del empleo tuvieron por beneficiarios a 7.000 vallisoletanos.

Como aspecto novedoso de la actualización propuesta, el borrador aprobado en Junta de Gobierno recoge, también en beneficio de los ciudadanos, una exención en la tasa por la grúa para los dueños de los turismos trasladados al depósito municipal cuando la retirada haya sido ordenada por la autoridad judicial o administrativa y posteriormente se confirme que dicha orden se produjo sin mediar responsabilidad imputable al afectado. En ese caso, según ha advertido Blanco, "quien deberá pagar será la autoridad judicial o administrativa que haya ordenado la retirada del coche".

Por otro lado, la Concejalía de Hacienda continúa trabajando en tareas de adaptación técnica y modernización de la gestión tributaria municipal para poner a disposición de los ciudadanos, en el plazo más breve posible, la 'Cuenta Corriente Tributaria', que fraccionará los pagos a lo largo del año mediante el establecimiento de una cantidad fija.

El presupuesto de 2102, A

La baja

Durante su comparecencia ante los medios, el concejal económico ya ha anticipado que el presupuesto municipal para 2012 en el que trabaja el equipo municipal de gobierno "es posible" que experimente un descenso, si bien no ha adelantado cifra alguna debido a las graves dificultades con las que se están encontrando a la hora de realizar un cálculo estimativo de los fondos con los que podrá contar.

"La confección está siendo muy difícil no sólo por la crisis sino también por la incertidumbre, ya que no sabemos lo que vamos a ingresar por trasferencia del Gobierno central, pues desconocemos si va a haber nuevos presupuestos o se van a prorrogar los actuales", ha incidido Blanco, quien en cualquiera de los casos ha advertido de que el criterio que regirá la elaboración del nuevo presupuesto municipal será el de "la austeridad en el gasto y una disciplina presupuestaria espartana, de forma que "no se va a gastar lo que no se tiene y no se va a gastar más de lo que se ingrese".