La avioneta siniestrada, una Cessna 172, colisionó en el aire con otra aeronave idéntica. En ésta volaban un instructor, Tomás G. A., de 33 años y un aprendiz, Guillermo A. M., de 23. Los dos resultaron heridos leves tras llevar a cabo un aterrizaje forzoso en un baldío. Fueron trasladados al Hospital de Alcorcón y por la tarde recibieron el alta.

Las avionetas pertenecen a la escuela de formación American Flyers España y habían salido del aeropuerto madrileño de Cuatro Vientos. Una primera hipótesis apunta que las avionetas colisionaron, aunque también pudo haberse tratado de un viraje brusco de una de ellas.