Cantabria registró en los cinco primeros meses del año 2.421 accidentes laborales con baja, lo que supone un descenso del 7 por ciento con respecto al mismo periodo de 2010, según datos del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo, recogidos por Europa Press.

El mayor recorte de siniestralidad se observa en el caso de los accidentes mortales, ya que de enero a mayo Trabajo no contabiliza ningún trabajador fallecido en la región, frente a las seis muertes registradas en el mismo periodo de 2010.

No obstante, esa cifra ya ha cambiado, al producirse este mes de junio el primer accidente mortal del año, el sufrido por un trabajador de Sidenor que murió tras desprenderse la colada de acero de uno de los hornos.

Hasta mayo también se redujeron los accidentes graves, con 29 siniestros, tres menos que en el mismo periodo del pasado año, lo que implica un descenso del 9 por ciento.

Por su parte, los accidentes leves disminuyeron de los 2.578 contabilizados en los cinco primeros meses de 2010 a los 2.392 notificados en los mismos meses de 2011, un 7% menos.

Por sectores, los servicios concentran el 48,7 por ciento de la siniestralidad laboral en Cantabria, con 1.180 accidentes entre enero y mayo. A continuación se sitúa la industria, con 711,3 (el 29%), y después la construcción, con 403 accidentes (el 16,6%).

En último lugar se encuentra el sector agropecuario y pesquero, que representa el 5,2 por ciento de los siniestros laborales (127 en el periodo analizado).

Comparado con el mismo periodo de 2010, todos los sectores han reducido su siniestralidad, menos el agrario. El mayor descenso se observa en la construcción, con una disminución del 19 por ciento. En la industria, por su parte, el descenso fue del 9 por ciento, y en los servicios, del 4 por ciento.

En cambio, en el sector agropecuario y pesquero aumentó un 22%, al pasar de los 104 accidentes registrados entre enero y mayo de 2010 a 127 siniestros en los mismos meses de este año.