El alcalde de Lugo, Xosé Clemente López Orozco, acompañado de la arqueóloga municipal Covadonga Carreño, ha visitado las obras para la visualización de los restos arqueológicos del acueducto romano y ha anunciado que esperaba que su visualización pueda estar "lista" para el verano.

Concretamente, los restos del acueducto romano de Lugo, del siglo I, podrán observarse a través de una ventana arqueológica que se ubicará enfrente la Diputación Provincial.

El hallazgo se produjo a raíz de unas obras en la calle San Marcos, donde se emplaza el Pazo Provincial, que acabará convirtiendo la zona en una gran plaza peatonalizada y que cuenta con financiación de la Unión Europea y del propio Ayuntamiento.

"Esperemos que sí, porque estamos trabajando a tope. Coincidió muy bien porque lo que se está haciendo no estropea para nada el proyecto primitivo con lo que se hará en el menor tiempo posible", ha manifestado Xosé Clemente López Orozco.

Sin embargo, la obra de la ventana arqueológica "tardará un poco más" que los trabajos en la plaza, y que, tal y como confía el alcalde, estarán concluidos en mayo. "Fue una gran suerte para Lugo encontrar estos restos romanos porque nos va a permitir reconstruir una parte importante de nuestra historia", ha explicado.

Además, indicó, "coincidió muy bien, porque va a ser más fácil su visualización, dejar los restos 'in situ' con las explicaciones históricas pertinentes y no va suponer ningún retraso para la obra".

Así, ha explicado que ahora se "está haciendo el anteproyecto y va a ser un atractivo más para la ciudad, que precisa que el turismo sea una parte importante para su desarrollo", convino Orozco. ACUEDUCTO

Covadonga Carreño ha concretado, por su parte, que este acueducto data de la época de Claudio como emperador. Partía de la zona de Pías donde se realizaba la captación del agua y llegaba hasta la Plaza de Santo Domingo, de dos kilómetros y medio de longitud, donde se ubica la galería de Sargadelos, y desde ahí se distribuía a toda la ciudad.