La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha comentado tras la toma de posesión del nuevo Gobierno valenciano que "toda renovación del Consell implica un punto de inflexión y un horizonte de esperanza". La alcaldesa considera que "los deberes más difíciles están hechos" y a partir de este momento se ha elegido a los que "les parece mejor para llevar adelante unas tareas que den lugar a una salida de la crisis importante".

Barberá cree se ha pasado una etapa, "quizá la peor", y el nuevo Consell se dispone a salir "en positivo, dinamizar le economía y crear oportunidades para llevar adelante la creación de empleo y de riqueza". Además ha destacado que la reducción de consellers —de 10 a 8 miembros— mantiene la voluntad de mantener la austeridad que ha presidido este año".

La alcaldesa ha revelado que conoce "mucho" al nuevo conseller de Sanitat, Manuel Llombart, al que le tiene "un gran aprecio y consideración", como también a la nueva consellera de Bienestar Social, Asunción Sánchez, que es "una gran comprometida" con los temas de Bienestar Social. Al que no conoce es al conseller de Hacienda y Administración Pública, Juan Carlos Moragues. "Sé que es un gran técnico y en estos momentos Hacienda lo que requiere es un técnico", ha destacado.