El candidato socialista a la Presidencia del Principado, Javier Fernández, ha anunciado este viernes una de sus primeras propuestas electorales para el medio rural. Se trata de un Plan de Impulso a la Competitividad Agraria y Ganadera en Asturias que apuesta por la innovación, la investigación y el uso de las nuevas tecnologías; el aumento de la productividad; el incremento del valor de los productos; el fomento de la exportación estable y creciente; y la optimización de la marca 'Asturias'.

Asimismo, pretende reforzar la cultura emprendedora; fomentar la formación; impulsar la reestructuración y diversificación del sector agroalimentario; y potenciar la producción ecológica y sostenible.

Otros de los planes que plantean los socialistas en este ámbito se dirigen a proteger el patrimonio rural asturiano, los núcleos rurales y su entorno, así como la actividad forestal.

Así lo ha dicho durante su intervención en el acto de presentación de propuestas sobre 'Nuevo diálogo rural urbano', en el que ha participado junto al alcalde de Valdés, Juan Fernández Pereiro, ante la presencia de dirigentes socialistas como la presidenta de la Junta General, María Jesús Álvarez; y los diputados Fernando Lastra, María Pilar Alonso o Clara Costales, entre otros.

Javier Fernández ha resaltado que cuando desde las áreas urbanas se acerca la gente a la zona rural, se debe ser consciente de que no se disfruta sólo de la naturaleza, sino que dicho paisaje y su entorno son el resultado de la "relación entre la naturaleza y las personas del campo durante siglos".

Una relación basada en la protección del entorno, que para el candidato hay que "valorar, compensar y remunerar". En esta línea, ha indicado que no se trataría de ayudas directas, sino de comprometer recursos y ayudas indirectas para las explotaciones competitivas y sostenibles.

Además, ha apuntado la necesidad de promover la productividad y la competitividad para afrontar la reforma de la PAC y los retos del sector más allá de 2013.

Para el candidato, Asturias es de tradición industrial, pero de "alma rural", por lo que aboga por dar respuesta a las diversas realidades y necesidades del mundo rural. Al respecto, ha incidido en que aunque el sector representa un cuatro por ciento del empleo asturiano y algo más de un dos por ciento del PIB regional, "no se puede prescindir" de él ya que "es fundamental mantener la actividad rural si se quiere mantener la identidad de Asturias".

Asimismo, ha apostado por robustecer el tejido de la industria agroalimentaria, afianzar el uso racional e innovador de los recursos forestales, promover el turismo de calidad, y desarrollar las TIC y las comunicaciones para vertebrar el conjunto del territorio asturiano y que no haya "ninguna" diferencia entre las zonas urbanas y rurales.

Por su parte, Pereiro ha destacado como retos del sector afianzar un territorio sostenible que permita establecer un diálogo fluido y estable entre lo rural y lo urbano; fomentar la actividad económica transformadora e innovadora en todos los ámbitos del medio rural; generar empleo rural; impulsar la generación y aprovechamiento eficiente de la energía; y garantizar las condiciones de igualdad en el acceso a los servicios públicos.