La Guardia Civil ha detenido en el aeropuerto de Barajas a un ciudadano de origen georgiano, de 30 años y residente en Tenerife, que ha amenazado dentro del avión en el que se encontraba con explosionarlo, aunque los agentes, tras registrar la aeronave, han confirmado que no había ningún artefacto explosivo.

Según informa el instituto armado en un comunicado, el incidente ha ocurrido al mediodía cuando el detenido, que responde a las iniciales G.T., ha embarcado en un vuelo que se dirigía a Tenerife Norte y la tripulación le ha pedido que desembarcara porque su destino era Tenerife Sur.

El hombre, que no tiene antecedentes penales, "al sentirse engañado, ha comenzado a argumentar que no volaría nadie y que el citado vuelo no llegaría a su destino" por lo que ha causado "gran alarma entre el pasaje, la tripulación y diversos empleados", precisa la nota.

Al mismo tiempo que abandonaba la zona de embarque, la Guardia Civil ha establecido un dispositivo de seguridad comprobando el vuelo del que G.T. había desembarcado, revisando el mismo en su totalidad, con especialistas GEDEX ayudados por perros adiestrados para la detección de explosivos.

Los agentes han comprobado que en la aeronave no se encontraba ningún artefacto explosivo, ni ningún objeto sospechoso que pudiese llevar a confusión o a sospecha de un atentado.

El detenido, tras gestionar un nuevo pasaje, y ya en la zona pública, ha continuado profiriendo amenazas diciendo que "haría explosionar una aeronave, que alguien pagaría todo su daño y que no tenía ningún miedo pues no se encontraba sólo en su acción", añade el comunicado.

Así, los agentes tras pasar un minucioso registro de seguridad al pasajero y todo su equipaje han procedido a su detención como presunto autor de un delito contra el orden público.