Alcalá.- Esta zona no ha cambiado tanto como podría parecer. Recoletos ya se llamaba así en el siglo XVII y la zona verde de la derecha era la simiente perfecta para lo que terminó siendo el parque de El Retiro.
Almudena.- Madrid siempre ha tenido iglesias pero hasta hace pocos años no estrenó catedral. La Almudena (132) ni siquiera estaba proyectada cuando Teixeira ideó su plano. En el lugar que ocupa, en el siglo XVII estaba la Casa de los Pajes y otras propiedades privadas, situadas en el límite del recinto amurallado. Éste tenía uno de sus principales puertas de acceso, la de la Puente, en la actual calle Segovia (127). De la muralla sólo quedan algunos restos pero los jardines del campo del Moro permanecen en el mismo sitio que hace cuatro siglos, dominando la zona. La famosa calle Bailén, que ahora canaliza todo el tráfico, ni tan siquiera existía.
Fuencarral.- Aunque parezca increíble, hubo un momento en que esta zona era parte de las afueras de Madrid. De hecho recibe este nombre porque era la salida al pueblo de Fuencarral desde el recinto amurallado.
Gran Vía.- Aunque parezca increíble, hubo un tiempo en que la Gran Vía no existía y en lugar de la gran calle de Madrid existía una maraña de pequeñas y estrechas callejuelas que fueron desapareciendo en los años treinta del siglo pasado. A finales del siglo XVI el eje dominante era la calle Convalecientes (número 54), actual calle San Bernardo. Si exceptuamos el derribo de las casas que dejaron espacio a Gran Vía, la zona no ha cambiado mucho en cuatro siglos, calle de la Luna incluida.
Plaza Mayor.- Aunque su disposición interior ha sufrido distintos cambios a lo largo del tiempo, el espacio que ocupa la plaza y la estructura abigarrada de las calles que la rodean ha cambiado poco.
Sol.- En el siglo XVII la Puerta del Sol no era la plaza en forma de media de la actualidad sino casi un mero cruce de calles. La zona es un mapa de la historia de Madrid y de España. La iglesia de San Luis (101) fue una de las primeras incendiadas cuando se proclamó la II República. En el Buen Suceso (103) que no fue trasladado a la calle Princesa hasta 1854, fueron asesinados numerosos españoles en la Guerra de la Independencia. Los cambios a lo largo de los siglos no han variado mucho la disposición del siglo XVII, aunque sí hay pequeños detalles.