«Me santiguo al entrar al agua, y eso que soy poco cristiana»

Eunate Aguirre se crió en la playa de Sopelana.
Eunate Aguirre se crió en la playa de Sopelana.
Eunate Aguirre se crió en la playa de Sopelana.

La bilbaína Eunate Aguirre se crió en la playa de Sopelana. «Pasaba más tiempo en el agua que un pez», y a los diez años descubrió el bodyboard (se practica con un bugui –tabla más corta que la de surf– y aletas). El primer fin de semana de octubre se impuso en Cavaliers (Francia), colocándose primera del Circuito Europeo a falta de la última prueba, en Marruecos, a finales de noviembre.

¿Se ha sentido, alguna vez, en peligro en el agua?

Sí. En Panamá tuve un accidente con el coral, me golpeé con la cabeza en el fondo y me quedé inconsciente.

¿Alguna superstición para protegerse?

Me santiguo antes de entrar al agua, y eso que me considero poco cristiana.

¿La ola más violenta?

El Pipeline de Hawái. Llega a medir cinco o seis metros y tiene una fuerza descomunal.

¿Todo es buen rollo entre los competidores?

Sí, aunque como en todo deporte de élite, todo el mundo quiere ser el mejor y eso, a veces, tiene un precio.

¿Cree que el ser humano respeta el mar?

Estamos tomando conciencia, pero sólo hay que ver las playas en verano, llenas de porquería.

También es monitora, ¿le gusta enseñar a los niños?

Es curioso su rápido aprendizaje y su energía vital. Me encantaría dedicarme a ello en el futuro.

¿Le gusta irse de pintxos?

¡Claro! Sobre todo por el casco viejo de Bilbao.

¿Keller (cerveza) o txakoli?

Una cerveza bien fresquita, por favor.

BIO

(24-05-1982) Natural de Bilbao, su residencia habitual está en Las Palmas de Gran Canaria. Reconoce que podría vivir sin ver el mar, «pero sería infeliz». Cuando era pequeña jugaba con las olas dentro de una burbuja rosa.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento