"El fútbol es un estado de ánimo", como dijo Jorge Valdano. Por eso, en la preparación de grandes finales, como la que enfrentará este viernes al Real Madrid contra el Atlético de Madrid, un aspecto clave será el psicológico, y todo apunta a que ambos equipos tendrán que trabajar mucho este apartado para superar los respectivos traumas con los que llegan al final de la temporada.

En ambos casos, la seriedad, el apoyo de la afición y aislarse del entorno para evitar pensar en el pasado o en las presiones externas destacan como las piedras angulares sobre las que se asentará el triunfo de uno u otro conjunto. "Una buena preparación del partido debería haber incluido la preparación mental del mismo, en el que se debería trabajar la autoconfianza y la confianza grupal", explica Joaquín Díaz, psicólogo del deporte.

En el caso del Atlético de Madrid, su mayor trauma es el hecho de que lleva 13 años y medio sin ganar al Real Madrid. La última victoria contra el eterno rival fue en 1999, y eso puede pesar mucho sobre la cabeza de los jugadores: "No se debe hacer referencia al pasado, pues no ayuda para nada. Al equipo habría que entrenarle mentalmente en el aquí y el ahora", asegura Díaz de nuevo, quien, no obstante, afirma también que el entrenamiento mental debe ser un proceso integrado en las sesiones habituales de trabajo para conseguir llegar a la victoria.

Los colchoneros tampoco deberían pecar de exceso de confianza pensando en el mal momento anímico por el que pasa el Real. "No jugaría al discurso fácil de que el Madrid está pasando por malos momentos. A los jugadores, pase lo que pase, no les gusta perder, y los del Madrid ya han hecho patente su distanciamiento con el entrenador", explica José Carlos Jaenes, doctor en Psicología del Departamento de Ciencias Sociales de la Universidad Pablo de Olavide.

"Individualmente, trabajaría con los jugadores la concentración, la resistencia a la frustración y a las situaciones adversas (como ir detrás del marcador), además de la posibilidad de ver este partido como una oportunidad única para completar un temporada redonda", continúa Jaenes. "Por otro lado, al público colchonero le pediría presión y ánimo continuo a los suyos, sin desmayo".

Por su parte, el Real Madrid deberá superar las luchas intestinas que han dividido al vestuario las últimas semanas y que tienen un elemento común: José Mourinho. Aún así, el pasado también puede jugar en su contra. "El Madrid debe jugar también sin pensar en sus victorias pasadas. Es un partido nuevo en condiciones nuevas", puntualiza Díaz.

Jaenes destaca también la necesidad de que el Madrid gestione la crisis desde sus jugadores: "No es hora de pensar en el entrenador. Seguro que líderes en el Madrid como Casillas o Sergio Ramos son capaces de crear una burbuja entre ellos con el objetivo de defender al club, ganar un título y ofrecer una imagen de unidad".