Acababa el encuentro entre el París Saint-Germain y el Evian, correspondiente a la 34ª jornada, y se montó una pequeña revolución francesa. Los problemas empezaron en el minuto 81, cuando el mediocentro italiano del PSG Marco Verratti vio la segunda amarilla y fue expulsado. El motivo de la expulsión fue protestar.

En el minuto 92, David Beckham recibía una roja directa por una entrada peligrosa sobre un rival. A su vez, el segundo entrenador parisino, por protestar la expulsión del inglés, también fue enviado al vestuario.

Y aunque con el pitido final todo parecía que se calmaría, fue cuando llegó lo peor. Al parecer, y según L'Équipe, el parisino Matuidi realizó algún gesto provocador al banquillo, lo que provocó que suplentes, técnicos y titulares de ambos equipos se enzarzaran en una pelea barriobajera.

Uno de los más activos fue el portero del PSG, el italiano Salvatore Sirigu. El jugador de Cerdeña también vio la roja, junto a Khlifa, uno de los jugadores del Evian implicado en la bronca.

El PSG no podrá contar, como mínimo la próxima jornada, con ninguno de los tres jugadores. En la clasificación, el PSG aventaja en 9 puntos al Olympique de Marsella y quedan 12 en juego.