"Hace un mes, estaba jugando en tierra y ahora estoy muy contento por estar en semifinales. Es un sueño para mí", declaró Rafa Nadal tras su victoria contra el finlandés Nieminen.

El español consiguió una nueva victoria con gran importancia por la superficie, hierba, y por ser los cuartos de final de un Grand Slam, Wimbledon.

Sólo Santana ganó

Es lo más lejos que llega un español desde 1972, año en que Manolo Orantes llegó hasta las semifinales. Hasta la fecha, tan sólo un tenista nacional, Manolo Santana, ha logrado proclamarse campeón en este torneo, en el año 66.

Al finalizar el partido reconoció que verse en esta ronda de la competición era algo "impresionante" para él.

Como un especialista

Nadal jugó ante el finlandés como un especialista en la hierba, sabiendo cómo jugar a su rival, buscando su golpe decisivo de derecha y llevándose el juego a la red.

Supo estar en los puntos decisivos, rompiendo el saque a su rival y no dejando que le ganaran el suyo.

A lo largo del torneo de Wimbledon demuestra en cada partido que su juego mejora, y que se adapta a esta superficie.

Superar a Baghdatis y a la final

Sólo el chipriota Baghdatis separa a Rafa Nadal de la gran final, partido que se disputará mañana.

Sobre el próximo duelo contra el chipriota Marcos Baghdatis, que eliminó en cuartos al australiano Lleyton Hewitt, Nadal anticipó que se trataría de un encuentro "difícil".

"Jugó muy buen partido contra Lleyton (Hewitt). Intentaré hacerlo lo mejor que pueda", comentó.

En la otra semifinal se enfrentan el suizo Roger Federer al sueco Jonas Bjorkman. Si español y suizo ganan en sus respectivas semifinales se puede repetir un duelo entre ellos, como ya ocurrió en Roland Garros.

¿Rey de la hierba?

Preguntado por si creía que podría ser el "rey" de la superficie rápida, el mallorquín, con su humildad habitual, lo tuvo claro: "No, para nada soy el rey de la hierba. Es Roger (Federer)".

Sí recordó que sobre césped le "gusta" jugar y añadió que quería terminar su carrera "jugando bien en hierba".