Imprecisiones fatales

El Etosa mostró dos caras en un igualado encuentro en el que el Joventut no se dejó dominar por los nervios
Johnsen intenta anotar ante la defensa de Archibald. 
Johnsen intenta anotar ante la defensa de Archibald. 
EFE/ MORELL
Johnsen intenta anotar ante la defensa de Archibald. 
Igualado encuentro el que ayer disputaron el Etosa y el DKV Joventut en Alicante y en el que los catalanes, que templaron antes sus nervios, fueron los que finalmente se llevaron el gato al agua en el último cuarto.

El Etosa no estuvo fino y, de salida, tardó cinco minutos en transformar su primera canasta. Un margen de tiempo demasiado amplio, pese a que ambos conjuntos mostraron imprecisiones desde el salto inicial, para aspirar a la victoria. El mejor momento de los alicantinos vino con la eliminación de su técnico, Trifón Poch, por dos técnicas, cuando aumentó su intensidad tanto en defensa como en ataque.

Pero una serie de imprecisiones en ataque atenazaron al Etosa hasta el extremo de que le costó el partido.

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