Ya es 1 de enero y por lo tanto ya se ha abierto el mercado de invierno en el fútbol español. Una oportunidad para los equipos con problemas para reforzarse y para los jugadores que no juegan de encontrar un sitio donde poder hacerlo.

El año pasado los equipos de Primera División se gastaron 62 millones de euros. Muchos van a la búsqueda de algún saldo, un jugador bueno, bonito y barato que dé buen resultado. Tienen hasta el 31 de enero para encontrarlo.

El único requisito para cambiar de equipo es no no haber disputado cinco partidos, entre Liga y Copa del Rey. Para los jugadores fichados de otras ligas, la única traba serán las competiciones europeas.

El mercado se irá calentando poco a poco: va a depender de las necesidades de los grandes. El año pasado el Real Madrid se gastó 36 millones de euros, pero este año intentará deshacerse de algunos jugadores que no cuentan para Bernd Schuster. El Barcelona anda a la busca de un portero . El más necesitado es el Valencia, que ya casi ha cerrado el fichaje del argentino Ever Banega.

Algunos nombres propios

Aparte de Banega, el claro protagonista en estos primeros días de mercado es Roberto Soldado. El Benfica de José Antonio Camacho suspira por él. El líder de la Liga también podría desprenderse de Dudek y Drenthe, cuya tumultuosa vida privada ha levantado ampollas en el Bernabéu.

El portugués Maniche es otro que podría cambiar de aires. Sus malas relaciones con Javier Aguirre y el interés del Inter de Milán podría precipitar su salida del Atlético de Madrid. Otro que podría dejar las filas rojiblancas es el delantero Mista. Otro de los focos de interés es

En el Valencia la llegada de Banega parece inminente, mientras que Zigic y Manuel Fernandes parecen alejarse de Mestalla.

En cualquier caso esto no ha hecho más que comenzar: por delante queda un mes de rumores y fichajes, algunos a precio de saldo.