Con tan sólo 10 años, Gisela Pulido sorprendió al mundo del kitesurf convirtiéndose en la campeona del mundo más joven de la historia. Pero sus triunfos no se quedaron en aquel 2004. Desde entonces, Gisela ha encadenado 8 campeonatos del mundo consecutivos, superando a rivales que casi le doblaban la edad con un repertorio de trucos increíbles. Su dominio duró hasta la pasada temporada.

En 2012, la aparición de Bruna Kajiya y Karolina Winkowska le relegó al tercer escalón del podio. "Me faltó potencia, sobre todo en condiciones de viento flojo", recuerda Gisela.

En ese momento, la catalana afincada desde hace años en Tarifa, decidió viajar a Orlando durante la pretemporada para prepararse con dos entrenadores de wakeboard, Mike Ferraro y Ryan Jones con el objetivo de coger potencia y mejorar la técnica en competición con poco viento.

"El wakeboard se parece al kitesurf en muchas cosas. Las maniobras son muy similares, pero el cable es más duro. Aquí tienes más potencia, más presión con la barra. Creemos que me va a ayudar a hacer kite en condiciones diferentes", afirma Pulido.

Tras una semana en el camp, Gisela ha vuelto a la competición con muy buenas sensaciones. "Me voy muy contenta de Orlando. He progresado en kickers y sliders, he hecho 360º y he mejorado en el sistema 2.0. Ahora tengo ganas de ir al agua y probar lo que he aprendido", comentó la catalana antes de ir a Marruecos, donde se celebró en marzo la primera prueba del Mundial Freestyle de Kitesurf de la PKRA. Terminó segunda en Dakhla (Marruecos)  por detrás de la polaca Karolina Winkowska, a la que logró superar en rondas anteriores a la final.

Gisela Pulido ha dejado claro que tiene sed de victoria y está dispuesta a trabajar duro para ser una rider más completa y para recuperar el primer escalón del podio mundial.