La selección española afronta su hora más decisiva: en cuatro días se juega su presencia en la Eurocopa 2008.

El sábado ante Dinamarca y el miércoles siguiente ante Islandia, España sólo tiene una opción: ganar.

Un tropiezo en cualquiera de los dos partidos supondría depender de terceros para clasificarse. Sólo una muy enrevesada carambola haría entonces posible el milagro de la clasificación.

España no falta a una fase final de la Eurocopa desde 1992 y a un Mundial desde 1974, pero no estar en Austria y Suiza en 2008 sería un fracaso de consecuencias imprevisibles para todo el fútbol español.

España tiene una ventaja: jugarse todo a una carta en una fase de clasificación no es una situación nueva para ella. En los últimos treinta años, España ha pasado por trances similares de los que casi siempre ha salido airosa.

En 1977, en lo que era una auténtica final para ir al Mundial de Argentina, España venció a la selección de la antigua Yugoslavia en el pequeño Maracaná con el mítico gol de Rubén Cano.

Eurocopa de 1984

Si hablamos de la Eurocopa, todo el mundo recuerda la de 1984, en la que la selección llegó a la final.

Pero antes de aquel memorable partido en el Parque de los Príncipes en París, España tuvo que vencer por 12-1 a Malta el 21 de diciembre de 1983.

Era el último partido de la fase de clasificación y España llegaba en segundo lugar del grupo. Necesitaba vencer por once goles de diferencia para ser primera y clasif icarse para la fase final. Lo logró tras un noche mágica que aún recuerda toda la afición española.

No el fueron tan bien las cosas a la selección en 1992. Encuadrada en el mismo grupo que Francia, la antigua Checoslovaquia, Islandia, Albania y Chipre, la seleccón española perdió en sus visitas a París y a Praga.

Eurocopa de Suecia

El 12 de octubre de 1991, el día de la Hispanidad, en una auténtica final en Sevilla, la selección perdió con Francia por 1-2 con goles de Luis Fernández y Papin. Adelardo marcó para España. Francia acudió a la fase final de la Eurocopa de Suecia y España se quedó por última vez fuera de una gran cita.

Dinamarca, una vieja conocida

La clasificación para el Mundial de 1994 también fue complicada y sufrida. España tuvo que esperar hasta el último partido, precisamente contra Dinamarca, para obtener el billete hacia Estados Unidos.

La selección venció por 1-0 gracias a un gol de Hierro en uno de los partidos más intensos de los últimos años.

Las últimas repescas

En los últimos años el fútbol español anda dando tumbos. Para llegar a la Eurocopa de 2004, con Iñaki Saéz en el banquillo, España tuvo que acudir a la repesca con Noruega después de quedar segunda de grupo, tras Grecia.

España cumplió: en el partido de ida disputado en Valencia la selección ganó por 2-1. En la vuelta, disputada cinco días después, España ganó con autoridad por 0-3, con goles de Raúl, Vicente y Etxeberría.

Más recientemente, y ya con Luis Aragonés al frente, la "roja" también tuvo que acudir a la repesca.

Serbia y Montenegro relegó a España a la segunda posición del grupo y tuvimos que jugarnos una plaza en el Mundial con Eslovaquia en noviembre de 2005.

Una goleada en el partido de ida (5-1) dejo todo resuelto para la vuelta disputada en Bratislava, donde el combinado nacional empató a un gol.