La UEFA ha emitido hoy un comunicado en el que anuncia que la próxima semana estudiará los sucesos acaecidos en la semifinal de la Liga de Campeones entre el Chelsea y el Barcelona en Stamford Bridge.

El organismo informa de que ha recibido los informes del colegiado del partido, el noruego Tom Henning Obrebo, y del delegado oficial, el lituano Janis Mezeckis.

Los jugadores del Chelsea protestaron airadamente la labor del colegiado durante y después del encuentro, que concluyó con empate a uno tras un postrero gol de Andrés Iniesta y la consiguiente clasificación del Barcelona para la final de Roma.

El club inglés, sus jugadores y su técnico, el holandés Guus Hiddink, se quejaron por lo que consideran mala actuación arbitral al no señalar varias penas máximas e incluso algunos, como el marfileño Didier Drogba -el jueves pidió perdón- lo hicieron con notable vehemencia tras acabar el encuentro.

La UEFA informa que estudiará estos informes así como las demás pruebas con el objeto de "decidir qué acción tomar en el curso de la próxima semana".

Asimismo, informa de que no ha recibido protesta alguna de parte del FC Barcelona sobre la cartulina roja mostrada al lateral zurdo francés Eric Abidal, quien por este motivo se perderá la final, al igual que el brasileño Dani Alves, éste por acumulación.

En Oslo

Por otra parte, Tom Henning Ovrebo, el árbitro de la discordia, se encuentra en su casa de Oslo, capital de Noruega, custodiado por la Policía, tal y como informa la edición digital de As.

Joern Jorgensen, portavoz de la Policía de la ciudad escandinava, ha indicado que "fue escoltado del aeropuerto de Oslo a su casa por el interés mediático que había despertado. Por esa razón vamos a mantener la vigilancia en su domicilio. No hay amenazas reales, pero estamos preparados en caso de que las hubiera".

Las críticas contra Ovrebo por internet, que dirige partidos de Champions desde 2001, son extremadamente furiosas, llegando a contener incluso amenazas de muerte.