"El tanto de Raúl nos afectó. En el vestuario vi al equipo un poco apagado en el descanso, con la sensación de que era poco botín un empate al descanso. La entrada de Kun nos volvió a activar un poco. Terminamos como empezamos. La pelota la teníamos nosotros. Nos vamos con la sensación de que pudimos haber ganado el partido", señaló el técnico mexicano.

El entrenador consideró que su conjunto creció hoy "futbolística y anímicamente", aunque lamentó la "desatención defensiva" que les costó el empate a su equipo, y declaró que aún le falta jugar más por las bandas.

El descanso no les sentó bien

"Parecía que íbamos 3-0. El vestuario estaba triste por haber encajado ese gol, cuando teníamos controlado al Real Madrid, estábamos bien colocados. No había relación en el ánimo con la primera parte que habíamos hecho", apuntó.

Recuperan la autoestima

"No se siente menos que nadie, se está dando cuenta de que puede jugar de tú a tú contra cualquier rival. El equipo está en esa dinámica, en ascenso de su autoestima", añadió.

El técnico también valoró la última ocasión de Agüero: "Es un chaval que habitualmente se le presentan muchos manos a manos. Me dio pena por él que fallara esa ocasión, pero es parte del juego. Él y Fernando hicieron una gran jugada y otro día entrará. Estamos todos en el barco".

Una de las claves era frenar a Guti

"Era importante. El genera mucho fútbol. No había que dejarlo circular libremente con el balón y creo que lo hicimos cabalmente bien".

También destacó a Raúl: "Es un hombre con sangre blanca en las venas. Es un ejemplo de profesionalidad. Hoy demostró una vez más que tiene un espíritu ganador. Yo estoy feliz de que esta gente esté recuperando su nivel".