Setúbal, el secreto mejor guardado de Portugal: tiene una de las 7 maravillas naturales del país luso

Portinho da Arrábida.
Portinho da Arrábida.
Olimpia Tosheva / iStock
Portinho da Arrábida.

Lo suficientemente alejada para pasar desapercibida y lo suficientemente cerca para poder visitarla fácilmente y descubrir todos sus encantos. La ciudad de Setúbal y sus alrededores son una verdadera joya escondida en el oeste de Portugal. La encontramos a menos de una hora de la capital lusa, Lisboa, pero ha logrado pasar desapercibida entre los turistas.

Aquellos que decidan adentrarse en estas tierras a orillas del Atlántico quedarán gratamente sorprendidos. Sus experiencias estarán cargadas de una naturaleza desbordante y un rico patrimonio cultural, pero también de la verdadera esencia portuguesa.

Cultura y gastronomía setubalense en su máxima expresión

La ciudad de Setúbal nos regala historia, patrimonio y cultura a cada paso. Las huellas del hombre en esta urbe se remontan a la prehistoria, pasando por la época romana con los yacimientos que aún se conservan en el lugar. Caminando por sus calles nos toparemos con edificios como el Convento de Jesús, un monumento revolucionario dentro de la arquitectura portuguesa. O bien la Fortaleza de San Felipe, antaño una importante construcción de defensa de la ciudad, ahora un mirador perfecto para contemplar la belleza natural de la zona.

Plaza Bocage en Setúbal.
Plaza Bocage en Setúbal.
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Y para los que hacen turismo a través del paladar, nada mejor que una visita al Mercado do Livramiento, el lugar perfecto para deleitarse con los productos regionales. Este mercado tiene casi 150 años de historia a sus espaldas y es uno de los más bonitos del mundo gracias a la detallada decoración con azulejos azules y blancos en sus paredes.

Pero más allá de lo tangible, es toda una experiencia pasear por sus barrios y su puerto y embelesar a nuestros oídos con el acento setubalense, conocido como "charroco". Nada mejor para conocer un lugar que mimetizarse con sus lugareños, disfrutando de una copa en las tabernas locales y probando su rico pescado frito en los restaurantes tradicionales, como por ejemplo la sardina de Setúbal, una de las Siete Maravillas Gastronómicas de Portugal.

Centro de Azeitão.
Centro de Azeitão.
BrasilNut1 / iStock

Si nos alejamos un poco de la ciudad, tan solo unos diez minutos en coche, llegaremos a la freguesía de Azeitão, una tierra de viñedos y edificios aristocráticos, otro mundo diferente dentro de Setúbal. En este enclave de ambiente único e inspirador podremos visitar lugares tan mágicos como la Quinta das Torres, una majestuosa finca con jardines y estanques, o la Iglesia de San Lorenzo, decorada ricamente con azulejos en su interior. Y es que en esta pequeña localidad la tradición azulejera sigue más viva que nunca, siempre fabricándose como en sus orígenes.

Humedales, playas, delfines y aves marítimas

La naturaleza de Setúbal es también uno de sus puntos fuertes. En estas tierras portuguesas se extiende uno de los mayores humedales del país: el estuario del Sado. El valor biológico de este enclave es incalculable, y es que se trata de una de las tres únicas zonas protegidas de Europa donde se puede encontrar una comunidad residente de delfines.

Estuario del Sado.
Estuario del Sado.
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Los amantes de la observación de aves también encontrarán aquí su lugar. El Moinho de Maré (traducido como el molino de marea), situado en la Herdade da Mourisca, es un verdadero paraíso para los ornitólogos. Cigüeñuelas, flamencos, aguiluchos laguneros y cigüeñas blancas sobrevuelan el lugar creando un auténtico espectáculo.

Ahora, pasamos del este de la ciudad de Setúbal al oeste, a las verdes laderas de la Serra da Arrábida que se inclinan hacia el mar y se funden con el azul de las olas. A esta combinación se unen extensas playas donde la paz y la tranquilidad serán nuestros únicos acompañantes. Entre estos arenales destaca Portinhio da Arrábida, una de las Siete Maravillas Naturales de Portugal. Además, en la carretera de acceso a esta playa nos toparemos con la cueva natural Lapa de Santa Margarida, a la cual se llega bajando por una larga escalera hasta el nivel del mar.

Portinho da Arrábida.
Portinho da Arrábida.
sopotnicki / iStock

En definitiva, toda la bahía de Setúbal en su conjunto conforma un paisaje espectacular. Esta forma parte del Club de las Bahías más Bellas del Mundo; concretamente, es la única de Portugal en entrar en esta exclusiva asociación.

Como es de esperar, la oferta de actividades de aventura es realmente amplia en Setúbal y su entorno. Para los que prefieren los deportes acuáticos, les esperan opciones como el esnórquel o el submarinismo. Aquellos que prefieran quedarse en tierra pueden optar por rutas de senderismo o ciclismo, o incluso escalada. Y quienes no se conformen con ninguno de los dos también podrán hacer parapente y descubrir la región a vista de pájaro.

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