Algunas de las plazas más emblemáticas de Europa para visitar: de Ciudad Vieja en Praga a la Grand Place de Bruselas

Las plazas son espacios amplios y abiertos dentro de las ciudades, donde confluyen calles y la vida local. Son lugares de encuentro, paseo, mercados y para disfrutar de su belleza. En algunas de ellas parece que el tiempo se ha detenido y ofrecen toda una experiencia a la hora de conocer la ciudad.

La definición de 'plaza' según la RAE es "lugar ancho y espacioso dentro de un poblado, al que suelen afluir varias calles". Pero más allá de eso, las plazas son el corazón y el alma de muchas ciudades europeas. Han sido escenario de eventos históricos, celebraciones y la vida cotidiana durante siglos. Hoy en día siguen siendo puntos de encuentro fundamentales para locales y visitantes.

Plaza de la Ciudad Vieja (Praga, República Checa)

Entre las plazas más emblemáticas de Europa, se encuentra la Plaza de la Ciudad Vieja en Praga, la capital de República Checa. Esta plaza medieval es una de las más queridas del continente, con su impresionante Reloj Astronómico del siglo XV y la estatua del reformador religioso Jan Hus en el centro.

Plaza Mayor de Madrid (España)

Pasando a España, la Plaza Mayor de Madrid es otra joya imprescindible. Sus orígenes se remontan al siglo XVI y cuenta con 129 metros de largo por 94 de ancho, completamente rodeada por edificios con 237 balcones. Un espectáculo arquitectónico en el corazón de la capital española.

Grand Place (Bruselas, Bélgica)

En Bruselas, Bélgica, encontramos la Grand Place, considerada el conjunto arquitectónico del siglo XVII más bello del país. Con el impresionante Ayuntamiento como edificio más destacado, esta plaza deslumbra a todos los que la visitan por su riqueza ornamental.

Plaza Marienplatz (Múnich, Alemania)

Múnich, una de las ciudades más importantes de Alemania, tiene su tesoro en la Plaza Marienplatz. Centro neurálgico de la ciudad desde su fundación, debe su nombre a la Virgen María, a quien se encomendaron para proteger a Múnich de una epidemia de cólera. Lugar de celebraciones y eventos desde tiempos inmemoriales.

Plaza de San Esteban (Viena, Austria)

Por último, la Plaza de San Esteban de Viena, en Austria, toma su nombre de la majestuosa catedral gótica que la preside, el monumento más emblemático de la ciudad. Rodeada de tiendas y bulliciosa actividad, es un punto ineludible en cualquier visita a la capital austriaca.

Recorrer estas plazas es sumergirse en la historia, la arquitectura y la vida de algunas de las ciudades más bellas de Europa. Son lugares que nos invitan a detener el tiempo, contemplar su belleza y dejarnos envolver por su magia atemporal. En tu próximo viaje por el continente, no dejes de incluir estas joyas urbanas en tu itinerario. 

Apúntate a la newsletter y recibe en tu correo las mejores propuestas para viajar por el mundo.