España está repleta de iglesias y santuarios en los que tenían lugar prácticas populares, algunas de ellas asociadas a la reproducción. Muchos de estos lugares mágicos aún perduran en el País Vasco. Uno de los más curiosos lo encontramos en la localidad de Oñati, en Guipúzcoa.
Se trata de la pequeña ermita de San Elías a la que acudían las mujeres para atraer los favores del santo y tener descendencia. Se encuentra en un paraje inquietante, semi oculta en el interior de la cueva de Sandaili.
Uno de los lugares más sobrecogedores de Guipúzcoa
En pleno desfiladero de Jaturabe y colgada entre acantilados de piedra se ubica la ermita de San Elías, que ha pasado a la historia por estar rodeada de mitos y leyendas de orígenes celtas. Lo primero que llama la atención de este entorno mágico son las vistas impresionantes a base de cumbres, valles y parajes verdes espectaculares.
Encustrada en el interior de la cueva de Sandaili o San Elías, la ermita está dedicada al santo que le da nombre. Y si es impresionante la belleza del entorno, también lo son los secretos que esta ermita medieval esconde y que están relacionados con poderes fertilizantes.
Una pila de piedra protagonista de la leyenda
La ermita cuenta con una pileta de piedra donde se almacena las aguas que caen por la pared y que, según la creencia popular, poseen el don de la fertilidad. Para realizar el ritual, las mujeres se sumergían en la pila hasta la cintura o metían tantos dedos como hijos deseaban tener. Después, dejaban en la mano del santo alguna prenda de bebé. De hecho, como agradecimiento a los favores del santo, hasta hace unos años se podía ver en el interior de la ermita un mantel bordado en oro, obsequio de una joven que había logrado tener descendencia.
Y la labor de San Elías no se limitaban solo a la fertilidad. También había personas que peregrinaban para pedirle que intercediera en época de sequías.
Otros lugares de interés en Oñati
Además de esta pequeña ermita y el impresionante entorno natural, aprovecha para descubrir Oñati, el pueblo vasco que según la Organización Mundial del Turismo 2023 se encuentra entre los mejores del mundo. El casco histórico (uno de los más bellos de todo Euskadi), la iglesia de San Miguel, el monasterio Bidaurreta y el increíble santuario de Arantzazu (siglo XV) están entre los lugares que no debes perderte. Y por supuesto, a su riqueza arquitectónica hay que añadirle los palacios de Antia, Madinabeitia y Baruekua.
Cómo llegar a la ermita de San Elías
Para acceder a la cueva y a la ermita hay que coger la carretera de Oñati a Arantzazu y tomar el desvío a la derecha, siguiendo las indicaciones de las cuevas de Arrikrutz. La entrada a estas cuevas la dejamos a la izquierda y tomamos la dirección Araotz. Al llegar hay que subir unas escaleras de piedra que conducen hasta la parte superior de la caverna donde se encuentra la ermita.
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