Todo el mundo alrededor del planeta conoce Stonehenge, el célebre monumento rocoso situado en Salisbury, Inglaterra, y que es uno de los lugares más misteriosos del mundo. Estos dólmenes construidos en la Prehistoria son las estructuras más antiguas de la historia, y aunque mucha gente crea que no se pueden encontrar ningún tipo de estos monumentos fúnebres en España, lo cierto es que hay multitud repartidos por toda la Península Ibérica, y a la gran mayoría de ellos se puede acceder incluso sin concertar una visita.
La Chabola de la Hechicera (Álava)
En la provincia de Álava se encuentra uno de los dólmenes mejor conservados de toda España. Conocida como la Chabola de la Hechicera, esta estructura se sitúa en el término municipal de Elvillar y data, según los estudios realizados tras el hallazgo de restos en la zona, de entre el Calceolítico (5.000 a.C) y la Edad de Bronce (2.500 a.C). Las nueve piedras que forman un sepulcro poligonal fueron descubiertas en 1935.
Dolmen de Axeitos (A Coruña)
A 50 minutos de una de las rutas de senderismo más increíbles de Galicia se encuentra otra maravilla, esta vez construida por los primitivos hombres. El dolmen de Axeitos, que se ubica en el municipio de Riveira, fue erigido en el Neolítico, concretamente entre los años 4.000 a.c y 3.600 a.C, y se compone de nueve losas gigantescas de piedra que se levantan hasta 1,80 metros del suelo. Los horarios de visita son libres y gratuitos.
Dolmen de Vallgorguina
A apenas media hora de Barcelona se emplaza el dolmen de Vallgorguina, también conocido como Pedra Gentil. Esta monumental construcción prehistórica formada por ocho piedras, incluyendo la del techo que está partida en dos, se cree que fue construida entre el 3.500 a.C y el 2.000 a.C, y algunos de los pilares los complementan otros mucho más pequeños. Reconstruido en 1885, cuenta la leyenda que era punto de encuentro de todas las brujas de la comarca.
Dolmen de La Cabaña (Burgos)
La provincia de Burgos es uno de los lugares con más dólmenes de toda la Península Ibérica, destacando por encima de todos el de La Cabaña. Está conformado por una cámara sepulcral y por un largo corredor de cinco metros, todo ello marcado con grandes bloques de piedra de dos metros de alto y protegido por un increíble túmulo, el conjunto de tierra y sedimentos que se levantaba sobre la tumba. Se ubica en la localidad de Sargentes de la Lora y en él se han encontrado restos de más de una docena de personas de la Prehistoria.
Dolmen de Santa Cruz (Asturias)
En la localidad asturiana de Cangas de Onís se encuentra uno de los megalitos más especiales de toda España, ya que no se encuentra en la superficie, sino bajo tierra. Los cinco grandes bloques de piedra del Dolmen de Santa Cruz datan del 3.000 a.C, miden más de dos metros y están decorados con tintes rojos y negros, pero lo especial es que se encuentra en el suelo de la Iglesia de la Santa Cruz, que data del siglo VIII (aunque ha sido reconstruida dos veces) y que es considerado el primer templo cristiano levantado tras la invasión musulmana. Se puede visitar de lunes a sábado de 10:00 a 13:30 y de 16:30 a 19:30.
Sitio de los Dólmenes de Antequera (Málaga)
Declarado Patrimonio de la Humanidad en el 2016, este complejo situado en El Torcal de Antequera está integrado por los dólmenes de Menga y de Viera, dos colosales construcciones del año 3.500 a.C aproximadamente, aunque la joya de la corona es el tholos de El Romeral, un imponente monumento prehistórico formado por una enorme cúpula con dos cámaras en su interior. Se puede visitar de martes a domingo de 9:00 a 18:00 (dependiendo de la época del año) y la entrada solo cuesta 1,5 euros.
Parque megalítico de Gorafe (Granada)
En 1998 abrió sus puertas el Parque megalítico de Gorafe, uno de los conjuntos prehistóricos más imponentes que se pueden ver en España. Cuenta con más de 240 dólmenes (aunque solo se pueden visitar 66) repartidos por todo el recinto que datan del Neolítico y de la Edad de Bronce, y se encuentra situada a solo una hora del centro morisco de la ciudad de Granada. Está abierto todo el día y su entrada es gratuita, aunque la visita al Centro de Interpretación es de tres euros.
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