La sequía es un problema cada vez más latente en España. Según los datos que publicó en primavera el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, la reserva hidráulica española estaba al 50,1% de su capacidad total, con 28.074 hectómetros cúbicos de agua. Estos datos se vuelven más preocupantes si tenemos en cuenta que el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU (IPCC) predice que las lluvias en el país se reducirán al menos un 15% más de lo ya previsto en el futuro, por lo que el porcentaje de agua de los pantanos y embalses bajará a más de la mitad.
El agua es un elemento muy preciado que se vuelve todavía más importante debido a las olas de calor y el consecuente aumento de las temperaturas, que propicia los golpes de calor por deshidratación. También el incremento del calor da lugar a que la producción agrícola se esté viendo mermada en el territorio.
A los problemas ocasionados por el cambio climático no ayuda que las reservas de agua mengüen (consecuencia del propio fenómeno ambiental). El panorama que existe hace que las Confederaciones Hidrográficas y las compañías de agua trabajen en la implementación de nuevos modelos de consumo de la propia agua, menos demandantes y adaptados a la situación, para reducir el impacto de la sequía.
Esri una empresa enfocada en el desarrollo de soluciones y servicios para los Sistemas de Información Geográfica (SIG) ha enumerado una serie de herramientas tecnológicas que ayudan a combatir la sequía sin necesidad de llegar a medidas restrictivas en el consumo de la población.
Monitorización de recursos hídricos
Los instrumentos de información geográfica sirven para ofrecer una vista gráfica a los españoles de la situación, para que los planes de concienciación sean más claros y efectivos. A través de una cartografía de los recursos hídricos, la ciudadanía puede tener una visión real de la situación existente y resulta más sencillo apelar a una participación activa de la gestión del agua.
La Dirección del Agua de MITECO, por ejemplo, dispone de su Boletín Hidrológico Peninsular. Se trata de una aplicación que recoge toda la información de la situación hidrológica de la Península Ibérica, lo que permite monitorizar el estado de los embalses, ríos y acuíferos, y evaluar las precipitaciones y las temperaturas que pueden afectar a dicho estado.
El boletín es como un panel de control que ofrece una vista de los datos clara e interactiva para facilitar los datos tanto para los investigadores como para los usuarios de a pie.
También hay una aplicación de mapeo llamada Solución Water Balance, que analiza la reserva de agua en cualquier punto del planeta. Esta plataforma tiene en cuenta distintos factores, como las precipitaciones, la evapotranspiración, la escorrentía, la humedad del suelo o la capa de nieve.
Otra app de monitorización, en este caso para conocer la exposición de distintas áreas con respecto al cambio climático, es Cumulative Exposure Climate Change. Esta herramienta analiza el nivel del mar, el calentamiento global, la desforestación o las precipitaciones para predecir las consecuencias que podrá haber en las zonas.
Análisis batimétricos con drones acuáticos
La Confederación Hidrográfica del Segura trabaja en un proyecto que consiste en realizar análisis biométricos desde las alturas, con el uso de drones. Generalmente, dichos análisis son costosos, sin embargo, los vehículos aéreos no tripulados y la tecnología GIS permite unos resultados más rápidos y sencillos, ahorrando tiempo y dinero.
Gracias a este tipo de medidas, se puede evaluar la reserva de agua en tiempo real. También permite tener un mayor control de los fenómenos derivados de la meteorología, como las inundaciones, o de los inconvenientes ocasionados por el paso del tiempo, como la sedimentación en el suelo de los embalses.
Microsectorización dinámica de la red de abastecimiento
Consiste en una solución GIS en la que se subdividen los sectores de distribución del agua en grupos más pequeños y homogéneos. El objetivo de esta práctica es optimizar la gestión de la red y mejorar la eficiencia de entrega de un elemento tan preciado como el agua a la ciudadanía.
Además de un reparto óptimo, esta microsectorización propicia la detección temprana de fugas y pérdidas y una mejor planificación y mantenimiento de la infraestructura de los embalses. En España, no solo se ha comenzado a hacer eso, sino que también se están implementando redes de saneamiento con el estudio de redes pluviales y se está trabajando en una mayor gestión de limpieza en la red.
Ampliación del diseño de redes de agua regenerada
Para combatir la escasez de agua, existen estaciones depuradoras del sistema de saneamiento y pluviales de las ciudades, que regeneran el agua. La idea es sustituir el agua potable en los sitios en los que no es necesaria, para reutilizar el agua. Por ejemplo, para el riego de los jardines o para los retretes.
Cada vez son más las empresas de aguas que usan Sistemas de Información Geográfica para diseñar redes de agua regenerada en España, convirtiéndose en un país líder en hacerlo en Europa. La emplean para limpiar las calles, para regar las zonas verdes y jardines o campos de regadío.
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