El síntoma común que puede confundir el cáncer de colon con las hemorroides

Cáncer de colon
Cáncer de colon
QUIRONSALUD
Cáncer de colon

Cuando uno experimenta un síntoma preocupante, lo prudente es siempre esperar a consultarlo con el médico antes de sacar conclusiones precipitadas. Y es que no es difícil confundir problemas leves y comunes con enfermedades más graves, lo que nos puede generar un gran estrés innecesario.

Síntomas comunes

Esto sucede, por ejemplo, con las hemorroides y ciertas formas de cáncer, como el de colon o el anal, que pueden tener una sintomatología similar a priori. Y, aunque siempre hay que ser precavidos y recibir la atención médica adecuada, hay que recordar que la explicación claramente más probable al cuadro clínico es en este caso la más leve, tal y como explica la Asociación de Pacientes con Cáncer Colorrectal.

Ambas afecciones pueden provocar sangrado, que puede resultar un tanto impactante para la persona que lo experimenta, y que puede verse en las deposiciones o en la ropa interior.

Además, no es raro que en el caso de las hemorroides aparezca también un cierto abultamiento en el ano, algo que también puede suceder en el caso del cáncer de ano. La razón de este síntoma, no obstante, es diferente en cada caso: mientras que en una hemorroide este bulto es en realidad un vaso sanguíneo, en el caso del cáncer se trataría de un crecimiento tumoral.

Diferentes causas y diferente cuadro

Y es que ambas enfermedades tienen en realidad etiologías muy diferentes, que explican la disimilitud en gravedad y en el resto del cuadro clínico.

Las hemorroides son venas en la zona del ano que se estiran y se hinchan por efecto de la presión; por ejemplo, puede ocurrir por realizar sobreesfuerzos al evacuar, por pasar mucho tiempo sentados, por tener relaciones sexuales por vía anal o por un embarazo.

El cáncer, por el contrario, es la división celular sin control a causa de un daño genético en determinado tejido.

Por ello, mientras que las hemorroides no suelen causar más síntomas que los ya mencionados, en el caso del cáncer colorrectal suelen terminar por aparecer otros como deposiciones alquitranadas, una sensación de necesidad de ir al baño que no desaparece tras defecar, presión o dolor en el vientre, fatiga, debilidad, cambios en los hábitos intestinales, pérdida de peso y náuseas.

Diferencias en los tratamientos

Teniendo en cuenta pues la gravedad y las etiologías de ambas enfermedades, el tratamiento como es natural es también muy diferente tanto en su naturaleza como en su grado de invasividad.

Las hemorroides suelen atajarse en el propio hogar, con medidas como incorporar más fibra en la dieta, tomar baños fríos o aplicar pomadas de venta libre. Normalmente, este tipo de enfoques logran un alivio importante de la sintomatología.

En cambio, el cáncer colorrectal o anal requiere procedimientos bastante más complejos e invasivos, que debe realizar en todo caso un profesional, como pueden ser la cirugía, la quimioterapia o la radioterapia.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento