La realidad de la cirugía estética en España indica que se realizan más de 204.000 intervenciones al año. Y he aquí el dato curioso. El 85% se practican a mujeres y el 15% a hombres, según el último informe presentado por la Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética (SECPRE). Ahora bien, por edades, la franja de población comprendida entre los 30 y los 44 años es la que más recurre a este tipo de retoques estéticos.
Sin embargo, cada vez son más las jóvenes que a penas superan los veinte años las que se suman a la moda por la toxina botulínica, lo que comúnmente se conoce como inyectarse bótox, o baby bótox, que a diferencia de la primera no tiene como objetivo la relajación del músculo, si no la debilitación del mismo para suavizar su aspecto. En esta ecuación por parecer más joven también entra en juego el uso del ácido hialurónico para rellenar las primeras arrugas de expresión.
Lo cierto es que la perdida de colágeno lleva a una disminución progresiva de la elasticidad y firmeza de la piel. Según el Dr. Manuel Vicente Leis, miembro del Grupo de Dermatología Estética y Terapéutica (GEDET) , "entre los 25 y los 40 años se pierde un 1,5% del colágeno total". Pese a esta disminución de colágeno, "no es hasta los cuarenta cuando se empieza a perder 1% de colágeno cada año", por lo que una piel de 30 años no requiere necesariamente productos dermocosméticos pensados para combatir el envejecimiento.
¿A qué edad es recomendable aplicarse bótox?
Hasta la treintena es posible que los problemas de la piel del rostro estén más bien relacionados con la aparición de acné, sobreexposición solar, o falta de hidratación. Por ello, lo que recomiendan los expertos en el área es comenzar a usar bótox a partir de los 30, pero antes de los 40 años preferiblemente. La doctora Ana Molina, autora del libro 'Piel sana, piel bonita' (Paidós), reflexiona sobre este asunto. "Antes, las mujeres y algunos hombres venían a partir los 50. Esa edad se rebajó para empezar a prevenir pero es que ahora salen tratamientos con nombres como 'baby bótox' y se empiezan a retocar a partir de los 20", sentencia la doctora.
"Siempre hemos divulgado que la medicina estética como herramienta de prevención y bien usada es muy eficaz pero estamos llegando a unos niveles que no me parecen de sentido común. Ahora con la exposición en redes sociales, los filtros y las comparaciones, cada vez vienen personas más jóvenes a las consultas. "El uso de redes sociales, la posibilidad de usar filtros y la aparición de aplicaciones que permiten cambiar las formas del rostro han contribuido a generar nuevas necesidades en pacientes jóvenes", reconoce Sergio Fernández, vicepresidente segundo de Sociedad Española de Medicina Estética.
Efectos secundarios y abuso del bótox
Uno de los grandes peligros de que se anuncien estos tratamientos en redes sociales es que no muestran los efectos adversos y la repercusión de hacerlos a edades tan tempranas. Algunos de estos efectos, que aparecen entre las 12 y las 24 después del pinchazo, y pueden durar hasta seis meses, son: cefaleas, náuseas, rigidez facial, inflamación en la zona, parálisis y caída de párpados. Otro efecto muy común es la sensación de tensión en el entrecejo.
¿Qué son las arrugas y por qué se dan?
La piel del rostro se mantiene tersa y firme gracias a tres tipos de proteínas: la fibrina, encargada de sostener las estructuras formando redes tridimensionales; la elastina, que da elasticidad como su nombre indica, y el colágeno, componente más abundante de la piel encargado de dar flexibilidad y resistencia. Las primeras líneas de expresión, pliegues, bordes y surcos comienzan a aparecer cuando los niveles de las tres proteínas empiezan a descender en el organismo.
Son varios los elementos que pueden deteriorar esta estructura cutánea: el exceso de sol, el tabaco, el uso de productos inadecuados, la vida en climas muy secos o incluso el exceso de limpieza hacen que la piel empiece a afinarse, empiece a adelgazar y que ese escudo protector que nos aísla del medio ambiente se vuelva más frágil.
Las zonas más afectadas son la frente, el ceño y las patas de gallo, seguido del surco nasogeniano y lo que se conoce como el código de barras, esto es, arrugas verticales que aparecen sobre el labio superior. Tratarlas supone tomar medidas preventivas que van desde una rutina antienvejecimiento enfocada en principios activos como la vitamina C y el retinol. "Hay que usar cremas que lleven retinol, que acelera la velocidad de la piel y hace que salgan más células jóvenes llenas de energía y hace que generemos más ácido hialurónico, que mantiene la piel más tersa", sostiene Jerónimo Ors, farmacéutico y director de la firma cosmética Paquita Ors.
Referencias
Informe 'La realidad de la Cirugía Estética en España'. Consultado online en: https://secpre.org/noticias-detalle/279/1/Nota%20de%20Prensa:%20SECPRE%20presenta%20%E2%80%98La%20realidad%20de%20la%20Cirug%C3%ADa%20Est%C3%A9tica%20en%20Espa%C3%B1a%E2%80%99,%20el%20estudio%20con%20datos%20actualizados%20sobre%20las%20intervenciones%20m%C3%A1s%20demandadas%20por%20edades%20y%20sexos el 6 de octubre de 2023.
Crece el interés y el uso de la Medicina Estética en España. Sociedad Española de Medicina Estética. Consultado online en: https://www.seme.org/comunicacion/notas-de-prensa/crece-el-interes-y-el-uso-de-la-medicina-estetica-en-espana-en-2021-se-realizaron-cerca-de-900.000-tratamientos-medico-esteticos el 27 de junio de 2023.
Botox. Redacción Médica. Consultado online en: https://www.redaccionmedica.com/recursos-salud/diccionario-enfermedades/botox el 6 de octubre
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