Estos son los tipos de medusas que te puedes encontrar España... Y las picaduras que pueden ser peligrosas

Con la llegada del verano y la temporada vacacional, son muchos los que se lanzan a darse refrescantes chapuzones en el mar. Puede ser algo tremendamente agradable y placentero, pero bajo la superficie acechan algunos peligros que pueden arruinarnos el baño... o incluso dañarnos severamente.

Muchos bañistas ya estarán familiarizados con las medusas: un grupo de animales bellos y extraños, del que algunos miembros son urticantes y venenosos. Estas son las medusas que, según el Ministerio para la Transición Ecológica, podemos encontrar en aguas españolas, y la potencia de su picadura.

Rhyzostoma pulmo

Es una medusa de gran tamaño (puede alcanzar hasta un metro de diámetro en su umbrela), forma acampanada y hermosos adornos de color violeta habita las costas mediterráneas y atlánticas y puede verse sobre todo durante el verano. Es urticante, aunque no suele producir cuadros graves; no obstante, conviene tener cuidado ya que simplemente el agua en el que esté presente, si está cerrada al mar abierto, puede producir irritaciones cutáneas.

Aurelia aurita

Tiene forma de plato y brazos festoneados, y es distinguible por cuatro órganos reproductores en forma de herradura y de color violeta que se encuentran en su centro. Habita principalmente lagunas y aguas costeras con variaciones salinas importantes. Su picadura es muy poco peligrosa, aunque puede producir irritaciones cutáneas.

Chrysaora hysoscella

La hysoscella se caracteriza por sus tonos amarillos y naranjas, su patrón atigrado y sus largos tentáculos, que pueden llegar a los cinco metros de longitud (a pesar de que la umbrela no tiene más de unos 30 cm de diámetro). Es frecuente en el Mediterráneo y en el Atlántico, donde puede formar enjambres de muchos individuos. El contacto con esta medusa puede ser peligroso, con lesiones eritematosas edema y verdugones, además de bastante doloroso.

Physalia physalis

No es exactamente una medusa, sino más bien de una colonia de pólipos. Por ello, su morfología es algo diferente, ya que su 'cabeza' flota, a diferencia de lo que ocurre con las medusas. Presenta vivos colores azules intensos y rosas-violetas, y pese al tamaño relativamente pequeño de su parte flotante (unos 30x10 cm en los ejemplares más grande) sus finos tentáculos venenosos, difíciles de ver, pueden superar los 20 metros de longitud. Es típica de aguas atlánticas templadas, aunque a veces se puede encontrar en el Mediterráneo.

Su picadura es muy peligrosa, ya que posee un potente veneno neurotóxico, citotóxico y cardiotóxico que puede llegar a provocar shocks neurógenos por el dolor, algo agravado porque sus tentáculos se adhieren y enredan en la piel de la víctima.

Velella Velella

De nuevo, no nos encontramos ante una medusa sino ante un hydrozoo con una estructura flotante. Forma grandes enjambres durante el invierno y la primavera. Afortunadamente, no supone ningún tipo de peligro.

Aequorea forskalea

Medusa transparente en forma de plato de unos 30cm con reconocibles patrones negros. Es común en el Atlántico, aunque también se puede ver ocasionalmente en el Mediterráneo, y a veces se puede concentrar masivamente en franjas costeras. No produce picaduras.

Carybdea marsupialis

Con forma cúbica y largos tentáculos, tiene un aspecto extraño, acentuado por su bioluminiscencia. Su picadura puede llegar a representar un serio peligro para la salud humana, pero dado que suele habitar aguas relativamente profundas (por debajo de los 20m) no suele provocar incidentes.

Mnemiopsis leidyi

En años recientes se han empezado a encontrar en las costas mediterráneas esta especie invasora propia de las costas americanas. Se trata de un organismo pequeño y de apariencia extraña, con bellas iridiscencias de colores, y se agrupa en grandes concentraciones (hasta 15.000 individuos por metro cuadrado). No produce ningún tipo de picadura.