Cambiar de teléfono es para muchos un pequeño ‘trauma’: que si buscar modelo, que si adaptarse al nuevo, que si ‘dónde van a estar todas mis cosas’... Otros, sin embargo, cambian de móvil como el que cambia de calcetines: tienen claro su modelo deseado y esperan con ansia a que caiga en sus manos.
¿Es enero un buen momento para cambiar tu smartphone? Popularmente se cree que sí por las rebajas de este mes tras la campaña navideña, momento en el que los precios suelen estar más altos -por mucho Black Friday y Cyber Monday que se monte, las marcas aprovechan el consumo de Navidad y no pierden un céntimo-.
Sin embargo, tal vez no estás teniendo en cuenta un destacado evento del sector de la telefonía móvil: a finales del mes de febrero se celebrará en Barcelona el Mobile World Congress (MWC), una de las ferias de smartphones más importante del mundo.
En ese espacio las principales marcas de telefonía presentan cada año sus buques insignia: este 2020 se sabe ya que lo harán firmas tan conocidas como Huawei o Xiaomi, y Samsung se adelantará unos días y mostrará al mundo sus nuevos smartphones de la familia Galaxy.
Comprando un móvil antes del MWC te arriesgas a que la marca que elijas saque la siguiente versión enseguida y el tuyo quede ‘anticuado’. Y si no es por estar a la última tecnológicamente hablando, al menos espera porque si vas a comprar la versión menos nueva, seguro que la rebajan tras sacar el último modelo.
Señales que te advierten que necesitas cambiar tu teléfono
Tu móvil no es eterno y por mucho cariño que le tengas -o muy pocas ganas tengas de gastarte el sueldo en un teléfono- un día te dirá adiós.
Hay algunas señales inequívocas de que tu smartphone está en las últimas, entre ellas destaca normalmente problemas con la batería -una de las partes que más se desgasta con el tiempo-, con la cámara o con la tecnología interna, que ya no soporte las actualizaciones del sistema, dejándote anclado en una versión anterior y que tarde o temprano se quedará obsoleta. Tanto iOS como Android suelen lanzar nuevas versiones de su sistema operativo cada año.
Otro problema común es la falta de espacio de almacenamiento. Aunque los teléfono actuales rara vez tienen menos de 64 GB, antiguamente no era tan común comprarse un dispositivo con una memoria interna de gran capacidad, tal vez porque no se esperaba que hiciéramos millones de fotos con nuestros móviles o que tuviéramos apps específicas hasta para regalar tus cosas.
Tanto si tu batería está en las últimas, si tu móvil no soporta más actualizaciones o si no tienes espacio, tu experiencia se verá severamente ralentizada.
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