En los hogares españoles podemos ahorrar de media casi 300 euros anuales, el 27% de nuestra factura de gas y electricidad, según el X Índice de Eficiencia Energética en el Hogar, elaborado por la Fundación Gas Natural Fenosa. Solo es necesario interiorizar sencillos cambios en nuestros usos y costumbres y mejorar el equipamiento energético.
En total, el potencial de ahorro de las familias españolas suma 5.350 millones de euros al año. La energía susceptible de ser ahorrada, 50.804 GWh, equivale al consumo eléctrico de Andalucía durante un año y medio. Un uso más eficiente de la energía evitaría, además, la emisión a la atmósfera de 11,1 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2).
El mencionado índice refleja que el mayor potencial de ahorro energético del hogar está en los electrodomésticos (43%), la iluminación (26%) y la calefacción (25,5%) Los porcentajes de posible ahorro son inferiores en el aire acondicionado (19,5%) y el agua caliente sanitaria (12,6%).
Algunos de los hábitos de eficiencia energética más extendidos en los hogares españoles son, según los resultados del estudio, la utilización de termostatos para regular la temperatura o el uso eficiente de la lavadora y el lavavajillas (esperar siempre a llenarlos antes de ponerlos y lavar en frío en la medida de lo posible). En cambio, permanecen como asignaturas pendientes la adopción de sistemas de gestión energétia o domótica en el hogar y un mejor mantenimiento de frigoríficos y congeladores.
1. Mejor cocinar a gas. Una cocina de gas natural es más eficiente que una eléctrica, pero si decides comprarte una cocina eléctrica, procura que sea de inducción, ya que son más eficientes.
2. La olla exprés consume menos. Cuando cocinas, utilizar ollas a presión o rápidas reduce hasta un 60% tu consumo energético. Recuerda, además, mantener las ollas tapadas para conservar el calor y apagar el fuego 5 o 10 minuos antes de acabar la cocción para aprovechar el calor residual en la última fase.
3. El tamaño sí importa. Utilizar ollas y sartenes que tengan un diámetro algo superior a la superficie de la placa hace que la cocción sea más rápida y que ahorres hasta un 20%.
4. Lavar en agua fría. Con la lavadora, utiliza el agua a la menor temperatura posible, ya que entre el 80% y el 85% de la energía que gasta una lavadora se produce al calentar el agua. Bajar la temperatura del lavado, por ejemplo, de 40ºC a 15ºC reduce el consumo de energía a la mitad.
5. Secadora, mejor a gas. Para secar la ropa, la manera más eficiente es aprovechar la energía directa del sol o de la calefacción en invierno. Pero si decides usar una secadora, mejor que sea a gas, ya que es más eficiente que una eléctrica. Si la que usas es eléctrica, procura que sea de clase A y utiliza el ciclo de enfriamiento progresivo para que la ropa termine de secarse con el calor residual de la secadora.
6. Micro antes que horno. Utiliza el microondas en vez del horno, porque consume menos. Pero si decides cocinar con el horno, procura abrirlo solo cuando sea necesario, aprovecha y cocina varios alimentos a la vez y también apaga el horno antes de finalizar la cocción para aprovechar el calor residual.
7. Energía fantasma. Apaga el ordenador si prevés que no lo vas a utilizar en los próximos 30 minutos. Apagar el piloto de encendido de la televisión y de otros aparatos como equipos de música o videojuegos también es útil.
8. Usa regletas con interruptor. El objetivo es agrupar varios aparatos para que puedas desconectarlos durante la noche o cuando no los vayas a utilizar. Solo el consumo anual de un router es de 19 euros/año.
9. Equilibra la carga de tu lavavajillas. Además de intentar no poner en marcha el lavavajillas hasta que esté totalmente lleno, tampoco conviene cargarlo en exceso ni superponer piezas, ya que no lavará bien y tendremos que volver a meter algunas cosas que no quedaron del todo limpias.
10. Ojo al mantenimieto. Realiza siempre un correcto mantenimiento de los electrodomésticos para lograr que trabajen con la máxima eficiencia.
11. Vigila la temperatura del frigorífico. Configura la temperatura del frigorífico en el intervalo entre 3ºC y 7ºC y el congelador a -18ºC. Por cada grado que bajas la temperatura, hay hasta un 5% más de consumo.
12.Aislamiento de las ventanas de la vivienda. El 40% de las pérdidas de calor del hogar se produce por las ventanas, por lo que para ahorrar puedes instalar una doble ventana o sustituir el vidrio y la carpintería por otras más eficientes. Aunque inicialmente suponga un desembolso, lo notarás en la factura en el largo plazo.
El 40% de las pérdidas de calor en el hogar se produce a través de las ventanas, según GNF
13. Fachadas y cubiertas. Un correcto aislamiento de las fachadas es esencial para mantener la climatización de tu hogar sin necesidad de derrochar energía. El 80% de las viviendas en España carecen de un aislamiento adecuado y casi el 70% de esas pérdidas de energía se producen por la fachada o la cubierta.
14. Calefacción en casa. Para ahorrar en calefacción, ajusta el termostato entre 19ºC y 21ºC durante el día. Durante la noche y cuando no estés en casa, ¡no lo apagues! Ponlo entre 15ºC y 17ºC.
15. Aire acondicionado. Aún queda mucho, pero cuando llegue el verano, si en casa tienes aire acondicionado procura ajustar el termostato a una temperatura de entre 24 y 26 grados.
Baleares, Cataluña y Murcia, las más eficientes
Diez de las 17 comunidades autónomas españolas registran un retroceso en el Índice Globla de Eficiencia, tres mejoran y cuatro de ellas se mantienen. Los hogares de las islas Baleares son los más eficientes, con una puntuación de 6,66. Les siguen los catalanes (6,6) y los murcianos (6,58). Canarias es la comunidad autónoma con el índice más bajo.