Un millón de españoles sufre glaucoma y la mitad lo desconoce

Ojos de una persona que padece glaucoma.
James Heilman (WIKIPEDIA)

El glaucoma es la segunda causa de ceguera irreversible en los países desarrollados. Se estima que afecta a 1 millón de personas en España, pero la mitad de los afectados desconoce que padece esta enfermedad, ya que muchas veces el glaucoma no produce síntomas hasta que la patología está muy avanzada y hay una pérdida de visión irreparable.

Este 12 de marzo se celebra el Día Mundial del Glaucoma, una patología que se produce por la falta de drenaje de los fluidos oculares, que causa un aumento de la presión del ojo disminuyendo la calidad de visión. El glaucoma es un grupo de enfermedades visuales que tienen en común la degeneración progresiva del nervio óptico; si no se controla puede producir secuelas importantes en la visión.

Como recuerda la Asociación de glaucoma para afectados y familiares, el glaucoma no conduce necesariamente a la ceguera, pero sí produce pérdida visual ya en los estadios iniciales. El mejor tratamiento es el diagnóstico precoz. De hecho, un 90% de la ceguera que provoca el glaucoma podría evitarse mediante la detección precoz y un tratamiento adecuado.

La prevención es tan sencilla como acudir al oftalmólogo o a una óptica de confianza donde pueden medir la presión intraocular. Este control debería realizarse de forma periódica cada año al cumplir los 40, o dos veces al año en caso de tener antecedentes familiares.

El glaucoma es una enfermedad crónica cuyo tratamiento a día de hoy se centra en la disminución de la presión intraocular y que, según explica la Asociación de glaucoma para afectados y familiares, puede enfocarse desde un punto de vista farmacológico y/o quirúrgico en función del grado de avance de la enfermedad y situación del paciente.

El profesional que diagnostica y trata el glaucoma es el oftalmólogo, pero actualmente en España el óptico optometrista tiene un papel muy importante, ya que muchas veces es el profesional al que primero acude el paciente. Por eso es fundamental que el óptico este preparado para detectar y derivar al oftalmólogo.

Uno de los sistemas de detección precoz del glaucoma en las ópticas lo ha desarrollado la multinacional española Indo. El óptico recibe al paciente y realiza el diagnostico optométrico: graduación, agudeza visual, medida de la presión ocular, historial clínico y antecedentes, toma la fotografía de fondo de ojo (retinografías) y envía a un especialista oftalmólogo en retina. Así, este especialista emite en menos de 48h  un diagnostico que hace llegar al paciente con las conclusiones más relevantes.