La autoestima en el estado de ánimo juega un papel fundamental. Una baja autoestima puede conducir a diferentes problemas de ansiedad y la dificultad para tomar decisiones. Y es que España es el país de mayor consumo de benzodiacepinas (para aliviar la ansiedad y el insomnio) del mundo; según la última Encuesta Europea de Salud.
La percepción de nuestro propio valor, el respecto y la confianza en nosotros mismos, son aspectos muy importantes para nuestra propia salud mental y a la hora de enfrentarnos al mundo. Aunque en la teoría suena muy bien; en la práctica, a veces nos encontramos con algún que otro problema. Y es que fomentar una autoestima positiva es un proceso continuo. Un experto nos ayuda a entender nuestro propio proceso.
¿Qué es la autoestima y por qué es importante?
"En psicología, en general definimos la autoestima como la percepción evaluativa que una persona tiene de sí misma, influenciada por emociones, experiencias e interacciones y comparaciones sociales", explica Unai Aso, psicólogo de Buencoco.
El experto explica que construir una autoestima estable, que no esté condicionada o basada solamente en logros o la valoración de los demás, es importante para nuestro bienestar psicológico porque "reduce la dependencia de la aprobación externa y nos hace más resilientes frente a situaciones difíciles o comprometidas".
¿Qué señales indican una baja autoestima
"Normalmente, suelen incluir aspectos como una autocrítica excesiva, cierta inseguridad a la hora de tomar decisiones o hacer elecciones, hipersensibilidad a la crítica, tendencia a menospreciarse o autopercibirse de forma negativa sin un juicio crítico, y tener una percepción distorsionada de la propia valía o de las propias habilidades", explica.
Para evaluar objetivamente la autoestima, los psicólogos recurren a instrumentos como escalas o cuestionarios validados, como por ejemplo la Escala de Autoestima de Rosenberg: "Más allá del uso de herramientas de evaluación, podemos analizar nuestro comportamiento de forma introspectiva o interactuando con los demás para ver cómo pensamos y reaccionamos ante diversas situaciones que requieran la puesta en práctica de elementos de la autoestima como los que hemos comentado anteriormente".
Cómo mejorar nuestra autoestima
"El primer paso es reconocer de forma consciente qué creencias tenemos sobre nosotros mismos y cómo nos autopercibimos. Podemos empezar por hacernos preguntas como: '¿Qué creencias tengo sobre mi valía como persona? ¿Cómo reacciono ante las críticas? ¿Puedo aceptarme como soy, con mis fortalezas y debilidades? ¿Me siento orgulloso de mis logros? ¿Cómo gestiono los errores y el fracaso? ¿Me comparo frecuentemente con los demás?'. Este proceso puede implicar realizar cambios en nuestro propio comportamiento cuando nos damos cuenta de que hay cosas que queremos cambiar, o bien acudir al psicólogo si vemos que necesitamos ayuda externa", matiza.
Diez consejos para trabajar en nuestra autoestima
- Practicar la autocompasión, esto es, tratarse a uno mismo con cierta bondad, comprensión y sin juicios, sin fustigarse por cada error cometido y asumiendo que no somos perfectos y podemos mejorar aspectos de nuestro comportamiento.
- Ponerse metas realistas: esto aumenta la percepción de autonomía y competencia. Esas metas tienen que ser específicas, medibles, relevantes para uno mismo y alcanzables.
- Crear un entorno de relaciones positivas y evitar comparaciones destructivas. Fomentar relaciones donde haya apoyo, respeto y entendimiento mutuo puede reforzar la percepción positiva de uno mismo.
- Desarrollar habilidades o hobbies: participar en actividades que disfrutamos, como hobbies creativos o deportes, pueden aumentar la autoeficacia y la satisfacción personal
- Practicar técnicas de relajación o meditación: en algunos casos, meditar un poco cada día y poner en práctica la relajación en determinadas situaciones puede ayudarnos a reducir la autocrítica y modificar creencias disfuncionales y patrones de pensamiento perjudiciales.
- Practicar actividad física regularmente, esto no solo ayuda a mejorar la salud física y el estado de ánimo, sino también la imagen corporal y, por tanto, la forma en que nos autopercibimos y nuestra autoestima.
- Reconocer los logros y recompensarnos por ello. Es importante celebrar los logros personales, independientemente de su tamaño, ya que esto refuerza la autovaloración. Un truco es mantener un diario o registro de las cosas que logramos para recordarlo y apreciar nuestros éxitos personales.
- Exponerse a nuevas experiencias: probar nuevas experiencias, exponerse a lugares novedosos, conocer a gente nueva, etc. puede aumentar la autoconfianza y la percepción de la propia capacidad para manejar los retos del día a día.
- Haz alguna contribución social o comunitaria: participar en actividades de voluntariado o contribuir a la comunidad mediante un sindicato, un movimiento social, una ONG, una asociación, etc. puede ayudarnos a mejorar la autoestima al percibirnos capaces y competentes, y parte de una misma comunidad que nos valora y aprecia. Además, nos puede proporcionar un sentido de propósito y valor propio que es igualmente importante.
- Si es necesario, acude a terapia. En psicología clínica contamos con intervenciones y terapias eficaces para mejorar la autoestima y otros problemas psicológicos, así que si lo necesitas, no dudes en solicitar ayuda de un profesional competente.
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