Cómo introducir la bruma hidratante a tu rutina de belleza según un experto

Este producto se utiliza con el fin de refrescar, hidratar y calmar la piel, pero su uso también se ha extendido con el fin de sellar o refrescar el maquillaje. 

Bruma hidratante.
Bruma hidratante.
iStockphoto
Bruma hidratante.

La bruma hidratante es un producto cosmético valorado por su capacidad para proporcionar una hidratación rápida y eficaz que cada vez se usa más en España. Y es que puede utilizarse en cualquier momento del día, ya sea sobre la piel limpia para un impulso de frescura o sobre el maquillaje para revitalizar y dar un acabado luminoso.

Incorporar una bruma hidratante ya no solo se utiliza para hidratar, también se ha extendido con el fin de sellar el maquillaje. Además, deja una sensación de frescura y relajación. Pero, ¿qué es exactamente la bruma hidratante?

¿Qué es y para qué sirve la bruma hidratante?

"Las brumas hidratantes son un producto habitualmente en formato spray que se utilizan con el fin de refrescar, hidratar y calmar la piel. Su uso también se ha extendido con el fin de sellar o refrescar el maquillaje", explica la Dra. María Rogel, dermatóloga del Grupo Pedro Jaén.

La experta insiste en que no tienen la misma capacidad hidratante que una crema o un sérum y, por lo tanto, no pueden sustituir a estos productos en nuestra rutina cosmética. Sin embargo, son un complemento en ciertos casos.

Beneficios de la bruma hidratante

"La bruma hidratante es un producto muy cómodo en momentos puntuales en los que necesitamos refrescar e hidratar la piel, por ejemplo, en verano, cuando sudamos más o en invierno si estamos muy expuestos a bajas temperaturas. También son muy útiles después de un viaje en avión donde la piel tiende a resecarse", sostiene.

Contiene una variedad de ingredientes que trabajan en conjunto para hidratar, refrescar y nutrir la piel. Estos ingredientes varían según la marca. La base está compuesta en gran medida por agua, pero también puede llevar otros ingredientes como el ácido hialurónico, la glicerina, o el propilenglicol, para retener la humedad en la piel; extractos de plantas como el aloe vera, el té verde o la manzanilla, para calmar y aceite de lavanda, rosa, o neroli, por sus beneficios terapéuticos y su aroma. 

Nuestra piel necesita unos cuidados de noche diferentes en invierno.
Nuestra piel necesita unos cuidados de noche diferentes en invierno.
iStockphoto

También podemos encontrar brumas con vitaminas E (tocoferol) o C, que son antioxidantes, o con bisabolol, que ayudan a reducir la irritación y promover la regeneración de la piel.

"La bruma hidratante puede aplicarse después de la limpieza facial y antes de aplicar los productos en sérum o crema. También puede reaplicarse a lo largo del día para refrescar el maquillaje o si notamos la piel más seca o tirante", explica Rogel.

Es importante elegir una bruma hidratante que se ajuste a tu tipo de piel y a tus necesidades específicas. Sobre todo en el caso de pieles sensibles o propensas al acné. 

¿Quieres recibir gratis todos los jueves en tu correo los mejores contenidos de belleza, moda y estilo de vida? Apúntate a nuestra Newsletter.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento