Comprobar el estado del vehículo es esencial antes de ponerse en marcha, sobre todo cuando vamos a realizar un viaje largo a través de la geografía de España, por tanto, lo preciso es revisar los neumáticos, los frenos y también las luces.
En relación con el último elemento del vehículo mencionado, su uso se convierte en primordial cuando no hay luz natural, además, según indica la Dirección General de Tráfico, todos los coches deben encender su sistema lumínico “entre la puesta y la salida del sol”, según reza el artículo 43 de la Ley de Seguridad Vial.
¿Debes contar con luces de repuesto en el coche?
La respuesta es no, ya que la Orden PRE/52/2010 eliminó esta obligatoriedad y modificó el anexo XII, sobre accesorios, repuestos, y herramientas de los vehículos del Reglamento General de Conducción: “para suprimir la obligación de llevar un juego de lámparas de las luces del vehículo, pues cada vez más vehículos llevan un dispositivo de alumbrado que sólo se puede manipular en los talleres autorizados y no por el usuario”.
Por tanto, según la normativa, los vehículos pueden no llevar sistemas lumínicos de repuesto, aunque en caso de circular con una luz fundida, la Guardia Civil nos sancionará por esta infracción.
¿Qué obliga la DGT a llevar en el coche?
En primer lugar, se deben portar tres documentos, ya sea en papel o en la aplicación MiDGT que son el carnet de conducir, el permiso de circulación y la tarjeta ITV, ya que así lo precisa la Dirección General de Tráfico.
También es obligatorio llevar un chaleco reflectante, los triángulos de emergencia o la novedosa luz V-16, ambas para avisar de nuestra presencia al resto de usuarios de la vía si suframos una avería en carretera. Por último, en los meses de invierno se debe contar con cadenas o neumáticos específicos de nieve, y también portar una rueda de repuesto
¿Cuándo es obligatorio una rueda de repuesto en España?
Hace varios años, el Reglamento de Circulación, y la Ley de Tráfico dejaron de requerir la presencia obligatoria de una rueda de repuesto en los turismos. Sin embargo, en caso de no disponer de una rueda de repuesto, es necesario contar con elementos sustitutivos, como el kit antipinchazos.
La falta de cualquiera de estos sistemas permitidos puede acarrear una sanción de 200 €, ya que la Dirección General de Tráfico (DGT) advierte que los agentes pueden imponer multas por desplazarse de un lugar a otro con neumáticos desgastados o en mal estado.
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