En España hay millones de conductores que deben conducir con gafas debido a sus problemas de visión. Lo que a priori es una práctica más que común en las carreteras, puede suponer un grave peligro para el resto de usuarios de la vía, ya que si no se llevan las lentes correctas, se puede provocar un accidente con numerosos daños materiales e incluso personales. Por ello, la Dirección General de Tráfico (DGT) recomienda siempre el uso de unas graduadas.
Muchos conductores creen que mientras 'vean bien' pueden ponerse al volante, aunque lo cierto es que la DGT tiene totalmente controlado quién debe llevar gafas y quién no, y además también tiene mecanismos para comprobar si las lentes que lleva el usuario se ajustan correctamente a su visión y han sido homologadas en una óptica (etiqueta CE) o si, por el contrario, se han comprado en alguna parafarmacia.
Las gafas de parafarmacia, prohibidas por la DGT
La DGT alerta de que las habituales gafas de lectura que se pueden comprar en farmacias, parafarmacias y otros establecimientos similares no son aptas para la conducción, ya que los problemas visuales como la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo pueden agravarse con el paso de los años y, por tanto, es necesario que un profesional óptico diagnostique qué gafas y qué graduación debe llevar.
Estas lentes, que suelen tener un reducido precio, suelen estar destinadas a actividades que no requieran de un excesivo ejercicio visual, como la lectura o ver la televisión, pero para conducir un coche es necesario tener unas correctamente ajustadas. Por ello, la DGT puede multar a quienes en vez de llevar unas gafas graduadas lleven unas de parafarmacia, y la cuantía no es precisamente baja.
¿Cuál es la multa por conducir con gafas de farmacia?
Si no se llevan las gafas graduadas en la carretera, la multa a la que se puede enfrentar el infractor asciende hasta 200 euros, por lo que es mucho mejor tener las lentes apropiadas que gastarse mucho menos dinero en unas menos eficientes y que además haya que abonar una cuantiosa sanción.
Tampoco se puede conducir con estas gafas de sol
Además de las lentes de parafarmacia, la DGT también prohíbe a los conductores circular con el coche con gafas de sol de filtro 4, ya que absorben un 92% de los rayos ultravioleta y pueden entorpecer la visión. En lugar de ellas, que están más destinadas a los deportes de invierno en la nieve o a la navegación marítima, se recomienda tener unas con los cristales polarizados, ya que pueden bloquear el reflejo de la luz solar.
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