Los coches han superado ya la barrera de la carretera y, ahora, tienen la vista puesta en el mar. Estos no son los primeros vehículos anfibios o poli-terreno que han salido de una cadena de producción, pero quizás son los más llamativos ya que mantienen la estética de un súper deportivo y la velocidad, incluso en el agua, de un bólido.
Gracias a la innovación de tres jóvenes egipcios, en las playas de este país va a ser posible cruzarse con estos coches que circulan a toda velocidad por el agua como si fuesen lanchas y adelantan yates en las costas de Egipto con cero atisbo de dificultad. Y es que gracias a su estética típica de un coche de carreras recién salido de Fast & Furious no es de extrañar.
Por el momento, hay un total de 12 unidades disponibles a la venta y sus precios cubren una amplía gama de precios, desde los 16.000 euros hasta los 37.000, dependiendo del diseño y de otras características como la potencia. Todos estos coches están fabricados con piezas así como con materiales egipcios, a excepción del motor, ha apuntado Karim Amin, el inventor de este concepto de vehículo. Como explican los tres jóvenes diseñadores, han optado por un modelo de propulsión japonés.
La intención es acabar de completar estos diseños para que sean tan competitivos en las carreteras como el agua, manteniendo la misma estética. Este detalle los diferencia de los vehículos anfibios que ya hay en el mercado, que tienen sobre todo una estética militar o poco atractiva para los conductores comunes.
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