Desde 1997, el Gobierno de España cedió a Cataluña las competencias de tráfico, es decir, la Dirección General de Tráfico no se encarga de supervisar y controlar las carreteras del territorio ubicado al noreste de nuestro país. Esta misión, junto a los Mossos d'Esquadra, corre a cargo del Servicio Catalán de Tráfico (Servei Català de Trànsit).
Esta situación también se da en comunidades autónomas como el País Vasco o Navarra, lugares donde también se decidió en su momento que todas las carreteras sean dirigidas y controladas por entidades similares a la del organismo presidido por Pere Navarro, el cual se encarga de ejecutar y planificar un Código de Circulación que tienes que cumplir todos los conductores de nuestro país.
No obstante, el Servicio Catalán de Tráfico traza y pone en marcha periódicamente sus campañas de control en las carreteras catalanas con el fin de centrarse en unas determinadas infracciones y, sobre todo, para mantener la seguridad por sus vías de circulación. Como suele ser habitual en el resto del territorio español, uno de los principales factores de riesgo en los accidentes son los excesos de velocidad. Por ello, la SCT intenta frenar o reducir este porcentaje a través de campañas y actuaciones.
Excesivos radares en Cataluña
Una de las principales opciones para combatir a este gran problema que azota nuestro país es con radares de velocidad. En nuestra península existen un total de 2.500 velocímetros repartidos por todo el país, según informó la Dirección General de Tráfico. Pues bien, Cataluña cuenta con 715 en su territorio, es decir, un 28,6% están colocados en las carreteras catalanas, por lo que se convierte en la comunidad autónoma con más radares de España.
Si analizamos con más detenimiento este dato, Cataluña dispone de un radar cada 16 kilómetros de carretera. Un dato significativo teniendo en cuenta que el resto de España tiene uno cada 58 kilómetros. Este número es aún más impresionante si comparamos la longitud de las distintas carreteras de España: el territorio catalán tiene unos 12.000 kilómetros de vías de circulación, por los 145.000 que dispone el resto de nuestro país.
Un radar de más de 4.000 multas al día
Como hemos citado líneas atrás, Cataluña cuenta con 715 radares en su territorio. Pues bien, Barcelona y Girona son las provincias que más velocímetros tienen a su disposición. La primera tiene 438 repartidos en 2.031 kilómetros de carretera. Este dato supone que habrá uno cada 4,6 kilómetros, mientras que en la segunda disponen de un radar cada 10,7.
Por ello, los conductores que circulan por las vías de carreteras catalanas son los más afectados ante este tipo de situación. El Servicio Catalán de Tráfico informó que, en 2022, había realizado más de 30.000 sanciones por exceso de velocidad en la anterior campaña del mes de abril. Esto supone un total de 4.200 multas al día, un número muy elevado y con el que están muy molestos los ciudadanos de esta comunidad autónoma.
Mismo número de multas que en España
La Dirección General de Tráfico, en julio del 2022, llegó a una espectacular cifra de 42.000 sanciones al día, pero la única y gran diferencia es que España cuenta con más de 145.000 kilómetros, por los 12.000 que existen en Cataluña. En nuestro país, a día de hoy, se suelen registrar unas 6.000 multas diarias sobre una red de carreteras que multiplica por diez a la catalana. Por ello, los datos que manejan en las vías de circulación catalanas es más que preocupante.
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